Aunque los peces no estén destinados a volar, cuando el Departamento de Vida Silvestre de Utah, en Estados Unidos, necesita repoblar los lagos y arroyos de gran altura de su territorio con estas especies, no le queda más remedio. Es lo que muestra el siguiente vídeo, que filma cómo se lanzan truchas al agua desde un avión que vuela a baja altura. 

Al proceso, según expuso el pasado año la agencia de vida silvestre, sorprendentemente sobreviven la gran mayoría de los peces. En el vídeo se puede ver el almacenamiento aéreo y el método por el cual los peces son esparcidos desde el cielo en una filmación ralentizada en partes para mostrar a los peces moviéndose frenéticamente mientras son liberados. 

Aunque es una vista inusual, la repoblación aérea se lleva a cabo varias veces al año en algunas zonas de Estados Unidos y ha estado en práctica desde la década de 1950. Los pilotos pueden arrojar hasta 35.000 truchas en unos cuarenta lagos en unas pocas horas, un proceso que es más rápido y eficiente que bombear peces a través de una tubería que desemboca en un lago, el método común para reabastecer lagos accesibles por carretera.

Una repoblación aérea que normalmente se realiza en julio

Asimismo, el citado departamento recordó el pasado año que alrededor del 95% de los peces sobreviven a la caída. El almacenamiento y la repoblación aérea puede realizarse varias veces al año, generalmente en esta época: a partir de julio. Las truchas arcoíris se arrojan a los lagos de montaña. Estos peces miden unos 7 centímetros de largo.