El canal de YouTube Mis Lances de Caza mostró de cerca, a finales del pasado mes de mayo, a tres jóvenes cazadoras que protagonizaron una jornada de descaste de conejos en la provincia de Guadalajara. Se trata de tres mujeres que entienden la caza como estilo de vida y aprovechan cualquier momento para poder practicarla, como así fue en aquella jornada en las cercanías de la localidad de Cabanillas del Campo, donde batieron una zona de ladera rodeada de siembras, con buena densidad de conejos.

El descaste en esta finca se realiza debido a la sobrepoblación de esta especie para ayudar a los agricultores a paliar los daños que producen y mantener así un equilibrio, algo que hicieron a la perfección las tres protagonistas.

Las tres jóvenes participantes en la jornada

Lourdes Carrasco, natural de la localidad toledana de Torrijos y veterinaria de profesión narra que comenzó en el mundo de la caza desde bien pequeña: «En mi casa siempre ha habido una afición enorme, y en cuanto di mis primeros pasos, comencé a salir al campo. Me quedaba dormida muchas veces porque era pequeña, pero estaba encantada de ir con mi padre de cacería. Mis comienzos fueron en la caza menor, abatiendo conejos o zorzales, y no hemos dejado de lado nunca la caza mayor. Llegó la comunión… y mi regalo fue una escopeta de 28mm», narra emocionada la joven.

La segunda cazadora es Marta López, de 27 años y natural de la localidad abulense de Sotillo de la Adrada, rehalera que gracias a su familia se ha ido adentrando en el mundo de la caza: «He estado quince años dedicada a la rehala, y ahora sigo practicando lo que más me gusta», explica para el canal.

La tercera componente de la jornada es Laura Ochaíta, cazadora madrileña de 25 años y conocida también de este medio de comunicación. Esta joven explica que es «cazadora desde bien pequeña». «Es mi pasión, mis padres tienen una armería y la caza me viene desde dentro», asegura.

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Conejos en descaste: ¿Cómo sé si debo cazarlos en mi coto?

Con los primeros rigores veraniegos comienza el descaste, una práctica que se remonta, en sus orígenes más modernos, a hace ya más de medio siglo. Nació allá por los años 50 del siglo pasado tras la aparición de los primeros brotes de mixomatosis en los conejos de nuestro país. Te contamos cómo cazarlos en tu coto aquí.