Este lunes Jara y Sedal compartía las increíbles imágenes de un enorme jabalí de más de 400 kilos que había abatido un cazador español en Turquía. El afortunado en poder meter en el visor a semejante monstruo ha sido un burgalés acompañado del cazador profesional Gonzalo García-Germán, que regenta la empresa Caza Salvaje & Safaris.

El resultado de la primera jornada: tres jabalíes imponentes

Dos de los grandes jabalíes abatidos el primer día. ©. G. G.

«Salimos un grupo de siete cazadores desde Burgos. Nos juntamos en Madrid, hicimos escala en Estambul, llegamos a Ankara y, desde ahí, nos fuimos a la zona norte del país», explica García-Germán sobre el inicio del viaje en el que se abatió uno de los jabalíes más grandes del mundo. El primer día sorteaban los puestos de las siguientes jornadas y se disponían a acudir a la armada de la primera batida.

En esta primera jornada los cazadores consiguieron hacerse con tres jabalíes imponentes de un total de diez abatidos en dos ganchos en los que participaron unas veinte personas con una media de seis perros cada uno batiendo el terreno. «Nos levantamos a las siete de la mañana y llegamos al hotel a las siete de la tarde», señala el orgánico español poniendo en valor la intensidad de la jornada disfrutada, además de resaltar que «son zonas de caza vírgenes».  

El segundo día, abatido otro jabalí importante

Gran jabalí del segundo día. ©. G. G.

En la segunda jornada de caza, según sigue narrando García-Germán, abatieron un jabalí con un trofeo también «importante», un día antes de la gran jornada en la que dieron caza al mastodóntico jabalí de más de 400 kilos.

En la tercera jornada salta el jabalí de 400 kilos: «Era como una vaca»

Otras imágenes del monstruoso jabalí. ©. G. G.

García-Germán explica que el jabalí de más de 400 kilos que ya se ha hecho famoso en las redes sociales, saltó en la tercera jornada: «No he visto un guarro así en mi vida y palabra que he abatido cientos de ellos», confiesa. El cliente burgalés que lo abatió estaba situado en el extremo de una armada, observando una gran ladera: «Los perreros me afirmaban que habían sacado un jabalí como nunca habían visto, por el volumen que tenía, por eso todos los cazadores se pusieron en alerta».

El puesto número 4 lo vio instantes después, pero lo dejó pasar ya que iba por un gran barranco a unos 400 metros de distancia. Un minuto más tarde, el jabalí le entró a unos 250 metros al cazador que finalmente lo abatió, quien lo metió rápidamente en el visor y le disparó en la zona de la cabeza, cayendo al instante. «Era una bestia en toda regla. No pudimos sacarlo del monte porque estaba metido en un barranco casi inaccesible, pero era un animal tremendo que pasaba los 400 kilos de peso seguro», indica Gonzalo.

Un jabalí de once años de edad

jabalí 400 kilos
El mastodóntico jabalí. ©. G. G.

La práctica totalidad de los participantes de la batida se hizo fotografías con el enorme jabalí debido a su volumen: «He visto muchos a lo largo de mi vida y no recuerdo algo similar», expone García-Germán. Tiene 26,5 centímetros de largo en cada colmillo, sobresaliendo por fuera de la mandíbula 11,5 centímetros cada una de las navajas. «Le cogimos hasta las medidas de los costillares y la parte que cubre el corazón, que estaba dura como el hierro. Cuando sacamos los colmillos, vimos que era un animal de once años», puntualiza.

¿Por qué crecen tanto los jabalíes turcos?

El tamaño que los jabalíes de Turquía pueden llegar a alcanzar es muy superior al de los de España, donde muy rara vez superan los 120 kilos. Los cochinos más grandes abatidos en nuestro país de los que se tiene constancia han sido cazados en Galicia, los célebres vakamulos. Pesan hasta 180 kilos y se encuentran en la zona de la Ribeira Sacra –provincia de Orense-.

García Germán explica que «la falta de movimiento y la escasa de presión cinegética» hacen que haya jabalíes de este tamaño».