El grupo ecologista SEO/BirdLife se ha caracterizado en los últimos años por sus ataques sistemáticos al medio rural. Entre algunos de estos ataques, se encuentra el impulso de medidas como la prohibición del silvestrismo o de la caza de la tórtola, aunque también ha mostrado su apoyo al blindaje del lobo que tanto preocupa a los habitantes de los pueblos.

Muchas de estas iniciativas las basan en informes como el del silvestrazo, que fue desmontado por la Universidad de Córdoba dejando en evidencia su nulo rigor científico. Esa ideología disfrazada de ciencia está también presente en uno de sus últimos trabajos: el Estudio sobre el origen y motivaciones de la criminalidad ambiental que puedes descargarte aquí.

Aunque el trabajo fue presentado en marzo de 2020, ha sido hoy cuando la Federación Andaluza de Caza (FAC) ha compartido en sus perfiles sociales una infografía realizada en base a los datos de ese estudio en el que SEO/BirdLife establece el siguiente perfil del delincuente ambiental: «Hombre, de entre 46 y 55 años. Nivel sociocultural medio-bajo. Ideología política de derecha o de extrema derecha. Trabaja en el medio rural, principalmente agricultor o ganadero».

Politizando la criminalidad ambiental

La FAC ha sido la primera en compartir este sorprendente dato, tras compartirlo en sus redes sociales con una pregunta que se respondía a si misma: «¿Se pueden politizar los crímenes ambientales? Sí.». Su presidente, José Mª Mancheño, hacía la siguiente reflexión a través de su cuenta de Twitter: «Hace tiempo que venimos denunciando que a SEO la ciencia le interesa 0, lo suyo es la ideología. Aquí los tienen, los amigos de lo verde, los salvadores de las aves, los defensores guays del medio ambiente… haciendo trabajitos políticos y además con dinero público».

Imagen del estudio de SEO/BirdLife financiado con dinero público.
Imagen del estudio de SEO/BirdLife financiado con dinero público.