La Oficina Nacional de la Caza y la Federación Andaluza de Caza, como miembro de esta entidad, solicitaron el pasado jueves al Ministerio de Medio Ambiente en una reunión celebrada en Madrid la necesidad de que se revisen y modifiquen las Directrices Técnicas sobre Silvestrismo que, actualmente, son el principal motivo de las restricciones sobre la modalidad.

Esta petición se ha apoyado en fundamentos técnicos que demuestran que el Silvestrismo es una actividad inocua para las poblaciones de fringílidos y que no existe otra solución satisfactoria a la práctica del silvestrismo, tal y como lo conocemos actualmente, de conformidad con la Directiva AVES. Estos argumentos serán expuestos de manera detallada en la reunión del Grupo de Trabajo de Fríngilidos del MAGRAMA que tendrá lugar en el día de mañana.

Además, por parte de la FAC, se aprovechó esta reunión para presentar el informe de la Universidad de Málaga (UMA) en el que se detallan una serie de deficiencias técnicas contenidas en uno de los estudios poblacionales de SEO Birdlife, estudio que sirvió de base, entre otros, para la elaboración de las Directrices Técnicas del Silvestrismo.

Dicho informe evalúa los métodos analíticos y estadísticos utilizados por SEO/Birdlife, analiza sus resultados y pone en relieve sus puntos débiles.

Entre las conclusiones que desmontan el informe de SEO caben destacar las siguientes:

Se afirma en el informe de SEO/Birdlife: “la cría en cautividad es una alternativa a la captura de especímenes del medio natural, éstas no deberían autorizarse”, aunque se aportan testimonios de cazadores que argumentan que la cría en cautividad no es viable.

Las poblaciones de fringílidos no están bien representadas, ya que, según el estudio «Las zonas de muestreo no están distribuidas al azar ni con criterios de hábitat», «no se incluyen observaciones por encima de los 1500m, lo cual subestima las poblaciones de aves como el pardillo», «los cálculos de tasas anuales de crecimiento no son correctos» y «las series de datos son muy antiguas como para tener aplicabilidad en tiempos posteriores a 2010″.

Cabe recordar que dicho estudio, denominado «Evaluación del concepto ‘Pequeñas Cantidades’ y demanda de aves para silvestrismo en relación a la aplicación de las excepciones contempladas en la Directiva 79/409/CEE, de Aves», sirvió en 2010 a los ecologistas como fundamento para instar al MAGRAMA el dictado de las Directrices con el objetivo de prohibir la modalidad. Además, SEO/Birdlife embolsó una subvención de 60.000 euros por la redacción del informe que ya se conoce como «El silvestrazo» y cuya validez científica queda en entredicho, según el citado informe que acaba de hacer pública la FAC y que puede descargarse en el siguiente enlace: Informe UMA sobre Estudio SEO/Birdlife de 2010