La falta de apego al mundo rural -cada vez más- hace que situaciones que en un entorno natural son normales, para alguien sin conocimientos del funcionamiento del reino animal se transformen en sorprendentes. Y mucho más con la presencia cada vez más constante en nuestra vida de las redes sociales, que magnifican todo. El mejor ejemplo es el siguiente vídeo.

En él se ve cómo un niño que habría capturado una rana se dispone a liberarla en lo que parece un parque urbano: «Bienvenido a tu nuevo hogar», se escucha en el audio de la filmación. Sin embargo, lo que no se imaginaba era que uno de los ‘vecinos’ habituales de este espacio, un pato, dejase volar sus instintos naturales y se la comiese al instante, dándose así un festín de proteínas.

La sorpresa en las redes sociales, especialmente en los comentarios de los más urbanitas, es evidente. Pero no es algo nuevo, ya que filmaciones de este tipo en las que la crudeza del funcionamiento de los ecosistemas se hace patente son, sorpresivamente, llamativas para muchas personas.

El vídeo acumula miles de reproducciones a través de Instagram, donde ha superado la barrera de los 200.000 ‘Me gusta’ en los últimos días y, por supuesto, los comentarios se cuentan por cientos.

En este sentido, recordamos otro vídeo similar que se hizo viral hace unos años y que muestra cómo una niña intenta devolver a la naturaleza al conejo que encontró en la cochera de su casa y al que había criado durante la última semana. Lo que no se imaginaban los padres ni ella tampoco creería es que la naturaleza le daría una lección en tan sólo unos segundos.