Este joven cordobés se estrenó a lo grande en la caza del jabalí en una jornada con permiso de caza al salto en el coto social de su localidad natal. Así fue la jornada cinegética en la que se hizo con el gran suido.

6/8/2019 | Redacción JyS

Tío y sobrino, con el gran jabalí. / P.T.

El joven Pablo Ruiz Escribano, de 19 años de edad y natural de la localidad cordobesa de Obejo, se estrenó en la caza de jabalíes durante la pasada temporada abatiendo uno de enorme envergadura. Lo hizo en el coto social de su municipio, situado cerca de la capital andaluza, al salto y con una escopeta superpuesta.

El ‘padrino’ de este ‘bautizo’ en la caza del jabalí fue su tío, Manuel Pérez Fernández –también de la misma localidad-, que ha narrado a Jara y Sedal cómo fue la apasionante mañana en la que su sobrino se hizo con el macareno. «De un lugar de unos 80 metros cuadrados, salió una piara de unos 20 jabalíes, toda una exageración…», relata emocionado aún el cazador cordobés.

«Era la primera vez que mi sobrino salía de caza de jabalíes y queríamos que fuese un día especial», añade explicando que ya muy de mañana sintieron que los animales iban a tener una actividad «fuera de lo normal» a pesar de tratarse de un coto social. Cinco fueron los cazadores que ese día salieron por el municipio y, tras inspeccionar una mancha, los perros pronto localizaron la pequeña zona en la que se encontraba la veintena de jabalíes.

Otra imagen al final de la jornada cinegética. / P.T.

Los cazadores se prepararon y, en cuanto el perrero dirigió hacia allí los canes, salieron «como una bala» todos los jabalíes y, entre ellos, estaba el protagonista de esta historia. Fue entonces cuando Pablo Ruiz Escribano, de un solo disparo con su escopeta superpuesta, logró dar caza al enorme animal, que destaca por sus grandes colmillos.

«Nos deja la satisfacción de haber bautizado a un joven más en el mundo de la caza y de saber que ya tiene la afición metida dentro», explica por último orgulloso Manuel Pérez sobre el lance protagonizado por su sobrino.