El Departament d’Agricultura ha movilizado personal de las Reservas Nacionales de Caza del Pirineo y efectivos de Forestal Catalana para intensificar la captura de fauna silvestre en zonas clave del Pirineo catalán. El objetivo es reducir el riesgo de transmisión de tuberculosis al ganado doméstico, especialmente en explotaciones de vacuno y caprino.
Intervención en tres comarcas clave
La actuación se centrará durante tres días consecutivos —lunes, martes y miércoles— en las comarcas del Alt Urgell, Pallars Sobirà y Ripollès, siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan. Durante ese periodo, los equipos desplegados se encargarán de intensificar las capturas de ciervos, gamos, jabalíes y corzos, priorizando aquellas áreas donde se ha detectado una mayor densidad de ejemplares.
Esta intervención responde a la necesidad urgente de contener posibles focos de tuberculosis animal, una enfermedad que en los últimos años ha registrado brotes tanto en fauna silvestre como en ganado doméstico. Aunque las comarcas del Alt Pirineu están clasificadas como de riesgo bajo, las autoridades autonómicas subrayan que es necesario actuar antes de que se alcance una situación crítica.
30 municipios afectados por el plan

La acción forma parte de un nuevo plan de control poblacional que ultima el Departament d’Agricultura y que incluye 30 municipios del Alt Urgell y el Pallars Sobirà, abarcando aproximadamente 160.000 hectáreas. Con este dispositivo, se busca reducir al mínimo el contacto entre fauna silvestre y ganado, especialmente en puntos de alimentación y abrevaderos, que representan focos de riesgo tanto de contagio directo como indirecto.
Desde Agricultura se insiste en que «el riesgo cero no existe, y en el supuesto de eliminar de la ecuación la posibilidad de transmisión a partir de la fauna cinegética, el riesgo de aparición de esta enfermedad infecciosa en rebaños domésticos sigue existiendo». Por ello, el plan también contempla medidas para evitar la confluencia entre especies.
Datos preocupantes en 2024
Durante lo que va de 2024, se han recogido 508 muestras de fauna silvestre en el Alt Pirineu: 357 de jabalíes y 151 de ciervos. Los resultados reflejan una situación preocupante: 18 jabalíes y un ciervo han dado positivo en tuberculosis, trece de ellos en la zona intervenida. Este dato refuerza la necesidad del plan de control, avalado legalmente por el Decreto Ley 5/2024, que permite a la administración actuar de forma anticipada ante potenciales riesgos sanitarios y medioambientales.
El Departamento recuerda que el riesgo de propagación de la enfermedad es multifactorial, y que es clave abordar el problema de forma preventiva para evitar males mayores tanto en la fauna como en la ganadería de montaña.