El tiro a larga distancia es una modalidad de caza que cada vez goza de más adeptos y que trae consigo innovaciones de todo tipo, desde dispositivos ópticos y apoyos hasta nuevos calibres. Entre estos últimos se encuentran los PRC (Precision Rifle Cartridge), que ofrecen diferentes opciones de diámetro de bala y de cartucho: el 6,5 PRC, el 7 mm PRC, el 6 mm PRC o el .300 PRC. Estos calibres se basan en las vainas de los WSM (Winchester Short Magnum), que tienen una acción más corta que reduce el peso y la longitud del cerrojo y una mayor capacidad de carga de pólvora que se traduce en disparos más rápidos y planos.

El primer calibre PRC que se creó fue el 6,5 PRC, en 2013 y en Norteamérica, de la mano de Hornady y sus famosas balas ELD-X. Le siguieron el .300 PRC en 2021 y el 7 mm PRC en la actualidad. Este último tiene una longitud total de vaina de 2,03 pulgadas, un culote de 0,53 que comparte con los WSM, una inclinación de la boca de la vaina de 30 grados y un diámetro de bala de siete milímetros.

Estas características lo convierten en uno de los más atractivos para el tiro a larga distancia. Aunque ya existían otros calibres de siete milímetros como el 7 mm WSM o el 7 mm SAUM (Short Action Ultra Magnum), estos no han tenido mucho éxito debido a su fuerte retroceso, que es donde el PRC destaca por ser mucho más suave que los demás.

Balas del calibre 7 mm. PRC© Hornady

Diseñado para grandes piezas

El 7 mm PRC es un calibre de tiro a larga distancia que se ha diseñado para cazar animales de gran tamaño como alces o wapitíes. Sin embargo, también se puede usar con corzos o venados europeos, ya que tiene un retroceso muy suave. Hoy sólo hay dos tipos de munición comercial para este calibre: la Hornady ELD-X Precision Hunter de 175 grains y la CX Outfitter de 160 grains.

La primera es una bala de punta polimérica que ofrece una gran precisión y expansión, mientras que la segunda es una bala monolítica que destaca por su dureza y penetración. Para comparar el rendimiento del 7 mm PRC con el del 7 mm Remington Magnum, que es el calibre más popular de 7 mm, podemos usar la misma bala: la Hornady ELD-X. Así podremos ver las ventajas de tener una acción más corta y una mayor capacidad de carga de pólvora. La realidad es que el 7 mm PRC supera al 7 mm Rem. Mag. en velocidad, tanto en el momento del disparo como a lo largo de la trayectoria.

Por ejemplo, una ELD-X de 7 mm PRC pesa ocho grains más que una de 7 mm Rem. Mag., pero sale del cañón a 914 m/s, mientras que la otra lo hace a 890. A 400 m de distancia, la diferencia es aún mayor: el 7 mm PRC mantiene una velocidad de 736 m/s mientras que el 7 mm. Rem. Mag cae a 700.

Un berrendo cazado en Estados Unidos por Israel Hernández con el 7 mm. PRC. © Israel Hernández

Densidad seccional

Este es un factor importante para determinar la eficacia de un calibre a la hora de cazar: se trata de la relación entre el peso y el diámetro de un proyectil, que se calcula dividiendo el peso por el cuadrado del calibre. La densidad seccional nos indica la capacidad de penetración de un proyectil en función de su peso. Cuanto mayor sea la densidad seccional, mayor será la penetración. Por eso, se busca un calibre que tenga una buena densidad seccional, es decir, un proyectil pesado y estrecho que pueda volar rápido y atravesar animales de gran tamaño.


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Concluyendo, La elección del calibre depende del tipo de caza que practiques. El 7 mm PRC se distingue por su rendimiento en distancias extremas, superiores a los 1200 metros. Si te gusta recargar tus propias balas y el tiro a larga distancia, puede ser uno de tus mejores aliados. Pero si prefieres uno más estándar, con mayor disponibilidad de munición y para cazar a distancias lejanas pero no extremas, quizás no notes mucha diferencia.