El siguiente vídeo muestra cómo un cocinero protagonista de la cuenta de TikTok Arroz y Desgracias explota contra los «ecologistas» y su inacción ante la situación que viven cientos de lugares en nuestro país en cuanto a los incendios que ya han arrasado cerca de 200.000 hectáreas.

En la grabación el cocinero expresa lo siguiente: «Demasiado pocos fuegos hay. Deberían apagarlos los ecologistas y los forestales, no los pobrecitos de los bomberos, ni los guardias civiles ni los municipales. Los ecologistas y forestales son los que tienen que ir a apagarlos, ya verías lo pronto que decían ¡Hay que limpiar las fincas!», denunciando el estado de muchas de ellas que han acabado en incendios en los últimos días.

«No quieren bajo ningún concepto que limpiemos fincas, ni que metamos cabras ni ovejas, solamente vaquitas. No nos dejan cortar ni un tomillo ni una rama. En cuanto a mí, en mi finca cayó un rayo, partió un árbol y todavía lo tenemos sin poder podar. Está toda la finca que no podemos bajar ni con el coche porque se ha caído en el camino. No podemos ni cortar el árbol hasta que vayan los forestales y le saquen una fotografía, llegue la Guardia Civil, levanten un atestado y un juez dictamine que podemos levantar el árbol», denuncia el cocinero.

@arrozydesgracias el problema de los incendios #arrozydesgracias ♬ sonido original – ArrozyDesgracias

En este sentido, recordamos cómo un ganadero denunció también hace unos días la situación que viven en el entorno del Parque Nacional de Monfragüe, donde no les permiten limpiar la vegetación por la protección de algunas especies. «El entorno de Monfragüe ahora mismo es un polvorín», señalaba un periodista dirigiéndose al vecino.

«Yo bien creo que se va a quemar más de la mitad del Parque al paso que va», le dijo el hombre. «¿Por qué?», le preguntó el periodista. «Porque nosotros estamos en el pueblo todos los días, año tras año, y si tú tienes tu jardín en casa, lo riegas y no lo podas, al final no cabe. Aquí está pasando lo mismo. Todos los años hay más maleza, más maleza, más maleza… y hay caminos a los que ya no se puede entrar ni andando. Antes pasaban los coches y ahora no se puede entrar», denunciaba.