Hace unos días Jara y Sedal publicaba cómo el veganismo había inventado las morcillas hechas con sangre humana. Ahora, su creador confiesa que «muchas mujeres me están pidiendo morcilla con su sangre menstrual y, aunque no es tan limpia, se podría usar centrifugándola antes para separar el plasma».
20/1/2018 | Redacción JyS

morcillas con sangre menstrual
La nueva ocurrencia del veganismo es la fabricación de estas morcillas con los restos de la menstruación.

Hace unos días, Jara y Sedal se hacía eco de la última ocurrencia del veganismo: fabricar morcilla con sangre humana. Durante el documental, una enfermera extrae una pequeña cantidad de sangre tanto al vegano como a la reportera de PlayGround –también vegana-. Posteriormente, un cocinero elaboraba la morcilla, mezclando el resto de los ingredientes con sangre humana y embutiéndolos en piel artificial, para que el alimento fuese totalmente apto para veganos. Ahora, la nueva ocurrencia de esta tendencia dietética le ha llevado a la fabricación de estas morcillas con los restos de la menstruación.
En una entrevista con Público, el «precursor» de la morcilla con sangre humana, Raúl Escuín, ha confesado que «muchas mujeres me están pidiendo morcilla con su sangre menstrual», aunque afirma que «esta sangre no es tan limpia como la sangre venosa, porque contiene trazas de óvulos pero sí es un tema que quiero indagar. Es un tema que estoy investigando con una compañera de la Universidad de Zaragoza. Tal vez se podría centrifugar para separar el plasma…», añade.
La primera foto muestra cómo extraen la sangre para hacer la morcilla que luego se comen, como la reportera en la segunda imagen. /YouTube

Y habla de «normalizar» un proyecto bajo el título «Tú y tu morcilla»: «Mi sueño sería hacer eventos en el que un cierto número de personas fuera a un sitio público en el que pudieran cocinar y degustar morcilla con su sangre. Me estoy poniendo en contacto con cocineros, fotógrafos, enfermeros que se han ofrecido de forma altruista para llevar la experiencia a las casas de la gente». De momento, ya tiene programado un tour en el que irá a Barcelona, Madrid y Zaragoza.
Sobre la polémica en la que se ha comparado éste con el caso de las «vacas locas», Raúl Escuín señala que «es cierto que las vacas enfermaron por comer restos de otras vacas pero hablamos de una cantidad enorme durante años. Esto son 40 mililitros que de tu sangre y es una práctica que no pretende ser habitual».
Para finalizar, recordamos otras extrañas ocurrencias veganas publicadas por Jara y Sedal, como la de la vegana australiana Maria Strydom, que decidió escalar el Everest para demostrar que «los veganos podemos hacer cualquier cosa» y murió en el intento. O la parte más divertida de esta dieta, como la del perro que ridiculizó a su dueña en televisión comiendo carne. También jocosa es la parodia que explica qué sucedería si los que consumimos carne habláramos como los veganos.
Como anécdota cabe destacar la sorpresa que se llevó un grupo de veganos mientras protestaban frente a un restaurante cuando el chef, cazador, cogió una pata de ciervo y la despiezó delante de ellos.

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