El cazador malagueño José María Galván, de 30 años de edad, abatió el pasado día de Nochevieja un tremendo jabalí de 100 kilos de peso y unas enormes defensas en una jornada de caza al salto en un coto de su municipio, Ardales, en esta provincia andaluza.

Galván explica que el pasado sábado dos compañeros y él salieron a este lugar de caza al salto -en su coto tienen permiso para practicar esta modalidad- y, «a los pocos minutos de salir del coche, los perros comenzaron a ladrar». Llevaban un pitbull y un alano español, dos perfectos canes para el agarre, armados con su chaleco de protección para evitar ser heridos. «Si no, con este animal lo hubiesen pasado mal…», relata el cazador a la redacción de Jara y Sedal.

3 kilómetros tras el jabalí

Otra imagen de los cazadores con el jabalí. © J. M. G.

Lo persiguieron durante tres kilómetros: «A todo el mundo que le hemos contado lo que anduvimos, no se lo creía. Íbamos corriendo por medio de la sierra hasta llegar donde estaba», relata Galván. Después de ese trayecto tras sus pasos -iba acechado por los perros-, finalmente éstos lo apresaron y los dos cazadores pudieron abatirlo a cuchillo: «Llevábamos escopeta, pero ese no hizo falta. Salió de en mitad del forraje. El mérito fue de los perros, sin duda», reconoce el cazador malagueño en palabras a este medio.

«Los perros fueron los grandes protagonistas de la jornada»

El trofeo del jabalí. © J. M. G.

No fue fácil, según relata Galván, aguantar el ritmo del macareno y estar todo ese trayecto tras él corriendo: «No pensábamos despedir el año de esta forma, pero fue una jornada increíble», expone. Y pone en valor la raza de los dos perros: «Fueron los grandes protagonistas de la jornada», vuelve a recordar. Asimismo, el cazador señala que, por fuera, las navajas le miden 7 centímetros, y más de 2 de ancho. El animal pesaba unos 100 kilos de peso y su trofeo ya está, desde este lunes, en manos del taxidermista.