La Unidad de Medio Ambiente de la Policía Local de San Sebastián de los Reyes, en Madrid, ha detectado la colocación de comederos destinados a la alimentación de jabalíes en zonas verdes municipales cercanas al entorno natural de la Dehesa Boyal de la localidad.

Estos espacios públicos, muy transitados por vecinos que salen a pasear o practicar deporte, se han visto ocupados por jabalíes que han encontrado refugio en ellos y que reciben soporte alimentario por parte de vecinos para facilitar su permanencia, provocando también la alteración del uso y el orden natural de estas áreas.

La concejal de Medio Ambiente, Patricia Hernández, recomienda a los vecinos en declaraciones al medio Crónica Norte «transitar por los senderos habilitados en las zonas públicas y no adentrarse en áreas frondosas susceptibles de presencia de jabalíes», añadiendo que «es obligatorio llevar el perro siempre con correa ya que el jabalí puede sentirse amenazado por su presencia y crear escenarios de peligrosidad tanto para la mascota como para sus dueños y acompañantes».

Además, desde la Policía Local, en coordinación con las concejalías de Medio Ambiente y Salud, advierte de que estas prácticas suponen «un riesgo muy alto para la integridad física de los vecinos, sus mascotas y la seguridad vial de la zona ocasionando, además, problemas de salud pública, al no tener estos animales ningún tipo de control veterinario y poder entrar en contacto directo con los animales que los ciudadanos pasean por la zona», recoge el citado medio.

Asimismo, el Consistorio también advierte que la colocación de comederos puede traer consigo la aparición de roedores y, si se identifica a las personas que los ponen, la acción puede conllevar sanciones de entre 750 y 1.500 euros.

Otros países como Suecia o Alemania prohíben alimentar a los jabalíes

Jabalí. © Shutterstock
Jabalí. © Shutterstock

Como hemos recordado en otras ocasiones en este medio, otros países como Suecia o Alemania informan en seis idiomas de la prohibición de alimentar jabalíes. En concreto, la administración de condados como el de Uppsala (Suecia) colocó hace unos años letreros de advertencia sobre el riesgo de infección de peste porcina africana en este sentido.