La enorme ola de indignación provocada en el mundo rural después de que el Gobierno de Pedro Sánchez haya aprovechado el periodo vacacional para aprobar el Anteproyecto de Ley de Protección, Derechos y Bienestar de los Animales ha hecho que, desde las filas socialistas, hayan intentado calmar los ánimos de los cazadores lanzando un mensaje de tranquilidad.

Pero ese mensaje no ha llegado a través de ningún representante del partido ni del ejecutivo, sino que se limita a un simple tuit publicado esta misma tarde con el siguiente texto: «Los animales son un miembro más de la familia. Desarrollamos una ley pionera que nos hace más humanos y mejor sociedad. Legislamos para poner fin a su maltrato, abandono y sacrificio, garantizando lo acordado con la Federación de Caza».

Y lo que el PSOE había acordado con la Federación de Caza era dejar fuera de la ley animalista a los perros de caza y animales utilizados para la actividad cinegética, algo que no ha cumplido, tal y como se puede ver en el borrador que esta misma tarde ha filtrado este medio y que fue el mismo al que ayer dio su visto bueno en el Consejo de Ministros.

La reforma del Código Penal, una amenaza superior a la de la ley animalista

Lo que tampoco ha mencionado el PSOE es su postura con respecto a la reforma del Código Penal, disfrazada de un endurecimiento de las penas por maltrato animal pero que en realidad supone un grave ataque a la actividad cinegética. Esta quedará en una grave situación de inseguridad jurídica si sale adelante la reforma planteada puesto que el Gobierno pretende extender los delitos de maltrato animal a todos los animales vertebrados, y no a los domésticos, que son los que actualmente contempla el Código Penal.

La reacción del PSOE llega después de que los tambores de guerra vuelvan a sonar entre los cazadores. Manuel Gallardo, presidente de la RFEC, hizo público ayer un vídeo en el que advertía con un duro mensaje a los socialistas de que la marea naranja volverá a las calles si no cumplen su compromiso.