Pineda de la Sierra es un pequeño pueblo de Burgos, ubicado en plena Sierra de la Demanda, concretamente en la Sierra del Mencilla, entre las dos montañas más altas de la provincia. Allí, la caza es una de sus principales fuentes de ingresos económicos, pero esto podría estar en peligro tras la reciente medida de la Junta de Castilla y León.

La falta de celadores en esta zona, encargados de asegurarse del cumplimiento de la ley de caza en cada jornada, ha supuesto un recorte del 50% de los ingresos percibidos por ese recurso y, por ende, una pérdida de más de 150.000 euros para los 27 municipios incluidos en la Reserva.

Esta circunstancia ha provocado que la Junta publicara un documento en el que recoge que el Plan de Caza 2024-2025 se adecúe «a la disponibilidad del personal del campo existente, inferior al 55%». En este sentido, van a suprimirse los permisos de ciervo y becada para esa temporada.

Pineda de la Sierra, Burgos

Las consecuencias van a ser enormes para Pineda de la Sierra. Tal y como Inés Camacho, teniente de alcaldesa del municipio, ha asegurado al equipo de Jara y Sedal, la caza es «uno de los mayores ingresos» que tienen en el pueblo. Allí solo se practica la caza mayor, concretamente batidas de jabalí, recechos de ciervo, becada y paso tradicional de paloma. «También teníamos recechos de corzo, pero llevamos ya dos años que no los sacamos porque no hay ejemplares», ha añadido.

Así afectará la medida de la Junta a la economía de Pineda de la Sierra

Sin embargo, esa decisión de la Junta ya no les permite vender los permisos de ciervos ni de becadas por la falta de guardas a «más o menos tres semanas, como mucho» de la época de la berrea.

«Si estamos en la Reserva es para que la Junta nos administre la caza y todo lo que conlleva ello. Si por nuestras hectáreas de monte nos corresponde un número concreto de batidas, nosotros, como ayuntamiento estamos para recaudar dinero y no nos importa que no tengan suficiente personal. Ellos se tienen que organizar para gestionar su trabajo», ha asegurado contundente.

«Nosotros con ese ingreso pagamos el alumbrado público», ha revelado Camacho. «Siempre hay que hacer alguna calle o alguna mejora», ha recalcado, y la caza es esencial allí para contar con los recursos necesario de cara a esas actuaciones.

Pineda de la Sierra, Burgos.
Pineda de la Sierra, Burgos.

La caza «es vida» para este pueblo de Burgos

En cuanto a los establecimientos de restauración y de turismo de este pueblo de Burgos, Pineda cuenta con un bar, una pensión que es propiedad del pueblo, un hotel rural, tres casas rurales y dos albergues, uno en la antigua estación de esquí y otro en el pueblo.

Como propietaria de un hotel, Inés conoce de primera mano las aportaciones que genera la caza más allá de la propia actividad. De este modo, ha apuntado que, generalmente, «es un deporte que lo practica gente con un nivel adquisitivo alto». En Pineda, los cazadores «tienen reuniones, comidas, cenas, alternan en los bares y se quedan a dormir», ha afirmado.

«En los meses de octubre y noviembre es la temporada de paloma y nuestro pueblo aumenta, más o menos, 20 personas más que no viven en él. Son cazadores de fuera que vienen a Pineda a cazar. Para nosotros eso es vida porque cada vez queda menos gente viviendo aquí», ha puesto en valor la teniente de alcaldesa.

La caza, importante fuente de ingresos de Pineda de la Sierra

Durante el invierno, la población de este pueblo puede estar en torno a los 40 vecinos, llegando a los 60 en los fines de semana y, en total, cuenta con 99 empadronados. Septiembre es el mes del recechos de ciervo y es un «idas y venidas de cazadores. Pineda es como si dijésemos el centro de reunión», ha considerado Camacho.

«Entre noviembre diciembre y enero estamos con la caza del jabalí», ha continuado. «Estas son cuadrillas de unos 30. Vienen por las mañanas a desayunar y por la tarde comen y alguno que no es de la zona se aloja. La verdad es que cuando se acaba la caza, los fines de semana se quedan vacíos».


Castilla y León elimina los permisos de caza de ciervo y becada en la Sierra de la Demanda


Inés ha reconocido que la caza «ingresa mucho dinero al ayuntamiento, que lo destina para solventar las necesidades más importantes como luz pública, calefacción, productos de primera necesidad o mejorar el estado del agua».

La práctica de la cinegética es imprescindible en Pineda de la Sierra para que, según ha afirmado Camacho, «siga teniendo el atractivo que tiene porque las subvenciones cada vez son más pequeñas». «A esto tenemos que añadir que desde el 2005 se nos quitó la subvención que venía de la Reserva Regional de Caza. Eso era de gran ayuda para hacer obras importantes el nuestro pueblo», ha sentenciado.