El cazador Diego Carrero, de 27 años de edad y natural de la localidad abulense de Sinlabajos, ha logrado abatir una extraña perdiz con un extraño plumaje parcialmente blanco terrenos de la sociedad de cazadores del municipio castellano leonés. Carrero explica a la redacción de Jara y Sedal que ya había conseguido verla en varias ocasiones por los terrenos de su coto, pero ese día se propuso hacerse con ella, y aunque era «dura y brava» logró abatirla.

«Me hizo recorrer más de veinte kilómetros», explica el cazador, que ese día iba acompañado de sus perros, un setter y un bretón. Tras varias horas tras los pasos de esta patirroja de peculiar tonalidad, finalmente estos sus canes caían en muestra… y logró abatir al ave. «Los cazadores antiguos me han comentado que pocas veces habían visto una perdiz blanca por allí, aunque sí las habían podido observar en alguna ocasión, pero al final entre las águilas y depredadores nunca lograban darles caza», señala.

Otra imagen de la perdiz de alas blancas junto con otras patirrojas. © D. C.

No es el primer ejemplar similar que compartimos en este medio, ya que hace dos años un joven castellonense y su padre lograron dar caza a otra perdiz similar en las cercanías de la localidad castellonense de FanzaraJara y Sedal se puso en contacto con uno de los dos protagonistas que lograron hacerse con el particular ejemplar. 

¿Qué explicación da la ciencia a estos plumajes en las perdices?

Otra imagen de la perdiz de alas blancas. © D. C.

Cuando surgieron casos similares de perdices blancas de los que se ha hecho eco este medio, Jesús Duarte, un experto biólogo, explicó que existen al menos dos estudios sobre la pérdida de pigmentación de las perdices y su relación con la alimentación de éstas.

Tanto el primero -elaborado en 2008 por expertos del IREC- como el segundo -de 2016 y elaborado por expertos de distintos organismos- explican que tanto la falta de carotenos en la dieta de las perdices como algunos problemas metabólicos relacionados con la oxidación de los pigmentos se traducen en esa falta de tonalidad en los colores rojos de patas, anillo ocular y plumaje.

Por otro lado, Duarte afirmó que evolutivamente aves con esta rareza «deben tener menos éxito reproductivo al ser menos atractivas».

Otras perdices peculiares… incluso de color azul

Jara y Sedal se ha venido haciendo eco en los últimos años de otras perdices peculiares, como una de color azul. Los cazadores que dispararon sobre este animal no creían lo que veían sus ojos. El animal cayó alicortado aunque al final consiguieron capturarla viva. Tras ello, decidieron curarla y mantenerla con vida dado el curioso color de su plumaje.