El Gobierno regional explica en un comunicado que se trata de tres especies que causan «graves daños» en las cosechas.
El jabalí, una de las especies cuyo control ha sido autorizado en Madrid. / Shutterstock
La Comunidad de Madrid ha publicado una orden para evitar durante el estado de alarma que la fauna silvestre produzca daños en cosechas y explotaciones ganaderas ante el aumento en numerosas comarcas de la región de especies de fauna silvestre cinegética, fundamentalmente de conejos, palomas torcaces y jabalíes.
El Gobierno regional explica en un comunicado que se trata de tres poblaciones cinegéticas que causan «graves daños» en viñedos y huertos, como es el caso de los conejos, así como la paloma torcaz en cosechas de garbanzos o lentejas.
Los jabalíes ocasionan, por su parte,
deterioros en los maizales pero «sobre
todo» se autorizarán los controles
en los municipios con el objetivo de evitar accidentes de tráfico en las
carreteras.
Únicamente se podrán controlar las
poblaciones en las parcelas agrícolas afectadas por daños y un perímetro de 100
metros a su alrededor situadas en los cotos de caza de los términos municipales
de determinadas comarcas forestales declaradas de emergencia temporal, añade la
nota.
Asimismo, será obligatorio disponer de la
correspondiente autorización para llevar a cabo los controles de fauna, y para
garantizar la distancia de seguridad se permitirán dos personas máximo por
fracciones de coto autorizadas en cada caso.
La Comunidad de Madrid subraya que se regulará este control
durante el estado de alarma ante la negativa del Ministerio de Agricultura de
establecer un marco común nacional ante un
mismo riesgo en todas las comunidades autónomas.
En este sentido, recuerda el comunicado
que la consejera de Medio Ambiente, Ordenación Territorial y Sostenibilidad,
Paloma Martín, solicitó el 8 de abril al ministro de Agricultura, Pesca y
Alimentación, Luis Planas, que el Gobierno central estableciera criterios
homogéneos para todo el territorio nacional ante la excepcionalidad de la
situación y la criticidad de garantizar un adecuado control de las poblaciones
durante el estado de alarma.
El Gobierno autonómico trasladó esta
petición, en concreto, sobre el control poblacional de diversas especies que
están afectando de manera directa a dos actividades esenciales como son la
agricultura y la ganadería, que garantizan el abastecimiento de alimentos a
toda la población.
La Comunidad de Madrid recibió el 14 de abril una carta en la
que se comunicaba que el mantenimiento de la actividad de control de las
poblaciones de fauna silvestre entraba en
el contexto del real decreto del estado de alarma con dos finalidades.
Por un lado, evitar el riesgo de
propagación de enfermedades animales, algunas de ellas zoonóticas, y, por otra
parte, prevenir los daños que puedan ocasionar a las producciones agrícolas o
ganaderas.
En una segunda carta hecha llegar al
Gobierno regional el 17 de abril, se ratificó la anterior misiva dirigida a las
comunidades recomendando el control de fauna silvestre para prevenir daños en
la agricultura y la ganadería.
Además, resalta el comunicado, esa segunda carta señalaba de manera explícita a las autoridades autonómicas como las más adecuadas para establecer los condicionados con que se llevarán a cabo dichos controles.