Una de las propuestas que forman parte del borrador del Real Decreto que regulará la Ley de Bienestar Animal, desarrollado por la Dirección General de Derechos de los Animales del Gobierno de España y al que Jara y Sedal ha tenido acceso, pretende hacer que perros, gatos y hurones tengan que pasar una revisión veterinaria anual obligatoria.
Se trata de un sistema similar al que siguen los vehículos con la ITV y, además, deberá quedar reflejada en el registro de animales de compañía. Dicho texto, elaborado por la dirección general liderada por José Ramón Becerra, todavía se encuentra en fase de revisión.
Sanciones de hasta 10.000 euros
«Todos los perros, gatos y hurones, excepto los gatos comunitarios, deberán ser objeto, como mínimo, de una revisión veterinaria anual, de la que se dejará constancia en el registro de animales de compañía correspondiente», indica el borrador.
Asimismo, el texto establece que esto también podría extenderse al resto de mascotas incluidas en el listado positivo. «El departamento ministerial competente podrá determinar las condiciones mínimas de tenencia, los requisitos de revisiones veterinarias, identificación, edad mínima de venta y si es necesario que el titular supere una formación en tenencia responsable en el caso de animales de compañía distintos a perros, gatos y hurones», expone.
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Sin embargo, dicho borrador no determina la sanción exacta que podría suponer no cumplir con esa revisión anual. En cambio, tal y como refleja la ley animalista, todo incumplimiento de la norma que no acarree un daño para el animal tendrá consideración de infracción leve y, por lo tanto, un apercibimiento o multa de 500 a 10.000 euros.
Como hemos comentado, esta medida es una de las novedades que propone el reglamento y que, en un primer momento, no constaba en el texto inicial. Junto con esta, el Ministerio dirigido por Pablo Bustinduy ha extendido el curso de tenencia responsable, que en principio solo afectaba a los dueños de los perros, también a propietarios de gatos, hurones y todas las mascotas que decidan incluir en próximas modificaciones.
Hay que recordar que esta medida no afecta a los perros de caza ni de ganado, excluidos de la norma
