2021 fue un año especialmente nefasto para el mundo rural y la caza. Hace solo unos días recordábamos algunas de las medidas aprobadas por el Gobierno contra la actividad cinegética en este periodo, a las que se suman la prohibición de cazar en parques nacionales puesta en marcha en 2020 o el borrador de Ley de Derechos de los Animales que tiene previsto aprobar en 2022. Además, como denunció Jara y Sedal en exclusiva, ha activado una reforma del Código Penal durante las fiestas navideñas. Se trata de una medida impulsada por Unidas Podemos y que podría acabar con la caza y la pesca en nuestro país.

Tras el clamoroso descontento del mundo rural en general, y de los cazadores en particular, y tras el anuncio de dos manifestaciones impulsadas desde el sector cinegético en Madrid, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) acaba de presentar una Estrategia Nacional de Gestión Cinegética con la que pretende aplacar el enfado del colectivo.

¿Qué es la Estrategia Nacional de Gestión Cinegética?

Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación esta estrategia ha sido diseñada para «fomentar una actividad cinegética sostenible, que permita el equilibrio entre la conservación de la biodiversidad, una gestión ecosistémica adecuada, el control de las poblaciones cinegéticas y la generación de riqueza en el medio rural». Para lograrlo, está estructurada en una serie de objetivos, metas, medidas y acciones, que recopilan propuestas y recomendaciones elaboradas sobre la base de un robusto trabajo técnico, apoyado en todo momento en las propuestas del mundo científico.

El primer borrador de este texto ha iniciado el periodo de consulta pública hoy 5 de enero y concluirá el próximo 2 de febrero. Durante este tiempo aquellos agentes implicados podrán realizar aportaciones, comentarios y sugerencias.

En la redacción de la estrategia, el ministerio ha contado con las aportaciones de las comunidades autónomas, los organismos científicos y las entidades más representativas del sector. Una vez que finalice el trámite de consulta pública y se terminen de realizar todos los requisitos preceptivos, el texto será sometido a la aprobación de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural, para su posterior aplicación por parte de las comunidades autónomas, que son las competentes en esta materia.

Los cinco objetivos de la estrategia

Los cinco objetivos de la estrategia cuentan con una serie de objetivos concretos que puedes ver en detalle en el documento resumen preparado por el MAPA. A continuación enumeramos sus principales líneas de trabajo.

  1. Defensa de un modelo de caza sostenible integrado en el desarrollo rural y como elemento de lucha contra la despoblación y para la gestión del medio natural, en equilibrio con otras funciones, servicios, aprovechamientos y usos del medio.
  2. Establecimiento de directrices de gestión de la actividad cinegética, que permitan el ejercicio ordenado y sostenible de la misma, adaptadas a las necesidades y nuevos retos de la gestión.
  3. Puesta en marcha de sistemas de información y monitorización de la caza interoperables y basados en el mejor conocimiento científico disponible.
  4. Fomento de la coordinación interadministrativa e intersectorial, e integración de las demandas medioambientales, sociales y económicas en la gestión cinegética.
  5. Mejora de la imagen social de la caza y promoción de sus beneficios medioambientales, socioeconómicos y culturales, así como la formación de los cazadores y fomento de buenas prácticas en el sector.

Mejora de la imagen social de la caza

Uno de los puntos más llamativos es el de la mejora de la imagen social de la caza. ¿Cómo prentende el MAPA lograr este objetivo? Estas son las medidas propuestas.

  • Fomentar las buenas prácticas de comunicación y comportamiento en redes sociales, para apoyar la actividad cinegética y la figura del cazador.
  • Promover la formación de cazadores, gestores y otros actores del sector cinegético.
  • Fomentar iniciativas de formación del cazador y del gestor cinegético en temas medioambientales, de conservación de la biodiversidad y gestión cinegética sostenible, para llevar acabo la propia gestión y facilitar la colaboración de los cazadores en temas de monitorización de especies, conservación, prevención de enfermedades, etc., pudiendo demostrar a la sociedad los beneficios de esta actividad. En este punto es donde tienen cabida la divulgación de las iniciativas de certificación de gestión cinegética sostenible por entidades terceras independientes y las marcas de calidad asociadas, actuaciones de custodia del territorio, pagos por servicios ambientales, etc.
  • Impulsar iniciativas de formación en todos los sectores que afectan a la actividad cinegética y la divulgación científica.
  • Establecer actuaciones para promocionar la caza a largo plazo, como la incorporación de mujeres y jóvenes, la profesionalización del cazador.