Hace unos días el diario El Mundo confundía conejos con liebres en una de sus noticias. El Norte de Castilla hacía lo propio ilustrando una noticia de corzos con un gamo mientras que El País insistía en asegurar que los rebecos eran corzos. El desconocimiento sobre naturaleza es muy grande en los medios generalistas y los gazapos no paran de colarse.

3/5/2018 | Redacción JyS

gazapos sobre fauna
A la izquierda imagen de la publicación de El Mundo en su web, a la derecha la de el Norte de Castilla.

Que medios de comunicación nacionales publiquen ‘gazapos’ como los que hoy compartimos es algo habitual. Algo inexplicable en la era de la información, en la que Internet nos brinda multitud de recursos para corroborar que el animal sobre el que estamos escribiendo es el que nosotros creemos. El ejemplo más reciente nos lo encontramos en el diario El Mundo. La versión digital de este periódico abordaba una noticia sobre la amenaza que supone la fauna salvaje para la agricultura en 36 municipios de Castellón y, para ilustrarla, eligió la imagen de una liebre especificando en el pie de foto: «Cultivos como los cítricos, frutales, olivos, hortalizas y viñedos están expuestos a la acción depredadora de especies silvestres como los conejos».
Que el redactor no diferencie un conejo de una liebre puede ser permisible, máxime cuando hablamos de gazapos, pero afirmar que un conejo «depreda» evidencia un profundo déficit de conocimiento de la naturaleza. A pocos golpes de teclado nos podemos encontrar una definición sencilla y simple en la que una herramienta tan básica como Wikipedia lo deja claro: «En ecología, la depredación es un tipo de interacción biológica en la que un individuo de una especie animal (el predador o depredador)12​ caza a otro individuo (la presa) para subsistir. Un mismo individuo puede ser depredador de algunos animales y a su vez presa de otros, aunque en todos los casos el predador es carnívoro».
Pero hay más ejemplos de gazapos en grandes medios. El Norte de Castilla publicaba el 28 de abril una noticia con el titular: «Segovia, el paraiso del cazador de corzos». Para ilustrar la noticia, el diario escogió la imagen de una cría macho de gamo. Además, bajo la citada instantánea podía leerse: «De los 2.411 precintos que la Junta distribuirá esta temporada, el 80% corresponden a la caza de este animal». No, evidentemente no se expiden esos precintos para cazar gamos. ¡Si Miguel Delibes levantara la cabeza!

El País y sus gazapos: confundiendo rebecos con corzos

El diario El País también ha dejado buenos gazapos para la historia del periodismo de naturaleza. Durante la ola de frío y nieve que azotó España el pasado invierno se hizo viral el vídeo de un grupo de rebecos atrapados en la nieve en la estación de esquí de La Molina en Gerona. Sin embargo El País explicaba que se trataba de una «manada» de corzos. Pero el periodista iba más allá, y trataba de sentar cátedra explicando: «Muchos medios han confundido a los corzos con rebecos, que son bóvidos, es decir, de la familia de las cabras, y que también viven en la zona». 
Tal es el desconocimiento que se tiene del medio natural en nuestro país, que no se libran ni partidos políticos como PACMA, que generan información que los medios difunden sin contrastar casi a diario. Esta agrupación prohibicionista ha dejado algunos de los ejemplos más sangrantes, confundiendo un macho montés con un carnero de las rocosas americano, una especie que ni tan siquiera pisa suelo europeo.
Estas fuentes tóxicas también han jugado malas pasadas a los grandes medios y les han hecho claudicar ante los gazapos. A Telecinco, por ejemplo. Este último caso llamó especialmente la atención ya que la asociación Lobo Marley publicó hace tiempo un vídeo en el que pedía a sus seguidores que les ayudasen a recaudar los 50.000 euros de fianza que un juzgado de Zamora les había pedido. Para ello recurrieron a la mentira: utilizaron un vídeo de caza de coyotes grabado en México. Más tarde, Telecinco en una noticia sobre el juicio de Luis Miguel Domínguez utilizó dichas imágenes afirmando que se trataba de caza de lobos ibéricos en España.
No obstante, este grave problema comienza a afectar de lleno a las nuevas generaciones. Un estudio publicado en la revista Biological Conservation que ya publicamos en Jara y Sedal, en el que se realizaron más de 1000 encuestas a niños de Mallorca y Asturias tanto en áreas rurales como urbanas, demostró que estos eran capaces de identificar antes una especie exótica que habita fuera de nuestras fronteras que la fauna autóctona. Algo que realmente preocupa y más cuando por otra parte ya es elevada la lista de medios que han publicado ‘gazapos’ confundiendo especies animales que nada tienen que ver.