La cazadora y fotógrafa de naturaleza Rocío Vicente Capa, natural de Valladolid, ha captado la curiosa imagen de una corza con unas extrañas incisiones en su pelaje a modo de rayas y con una apariencia fuera de lo común.
Rocío, que difunde habitualmente interesantes instantáneas sobre la naturaleza en su cuenta de Instagram, explica a la redacción de Jara y Sedal, a la que ha enviado las imágenes, que suele salir los fines de semana al campo a hacer fotos y que fue durante una de estas escapadas cuanto la localizó. «Me pareció muy rara y por eso intenté acercarme y fotografiarla bien», explica. La joven detalla que el animal «estaba en una zona de viñas», por lo que ella piensa que «podría haberse dañado con algún líneo o alambre».
La opinión del experto
Para tratar de arrojar algo de luz al curioso caso, Jara y Sedal ha enviado la imagen a Javier Iñurrieta, ingeniero técnico forestal y un experimentado cazador y fotógrafo de corzos que cuenta con un interesantísimo perfil de Instagram dedicado casi en exclusiva a esta especie cinegética. Iñurrieta opina que la incisiones en el pelaje de la hembra de corzo podrían deberse al «roce con vegetación o cruce de algún cierre con alambre».
«Por esta época, aunque falten varias semanas para la muda primaveral, es frecuente ver corzos que se les producen calvas con más facilidad por algún roce», detalla el experto en corzos. Además, lo que le ocurre en su pelaje «tampoco coincide con sarna o piojos malófagos», añade.
La afición por la fotografía y la caza de Rocío Vicente
Rocío Vicente, que ya ha protagonizado otras noticias en este medio por sus instantáneas, destaca por último su costumbre en sus días libres de acompañar a cazadores de todo tipo, desde galgueros a amantes de la caza menor o monteros, para hacer fotografías. «Cada vez que salgo aprendo una cosa nueva del campo, por eso cada vez me gusta más. Para esto, necesitas muchas paciencia y tiempo», señala. Y, como imagen curiosa, destaca la de un corzo que han puesto en el calendario de la Asociación del Corzo Español, que aún contaba con su cuerna recubierta de borra: «Llevaba mucho tiempo detrás de él», asegura.
