El declive de Podemos sigue materializándose y, esta vez, ha continuado demostrando su pérdida de apoyo en las elecciones del País Vasco. Las urnas han confirmado que la formación, encabezada por el reconocido ecologista López de Uralde, ha desaparecido del Parlamento vasco después de la sólida consolidación que tuvo en la región, siendo la fuerza más votada en las generales de 2016.

Ese mismo año se vivió en la comunidad el debut de los morados en el Parlamento, con un total de 11 diputados. Ocho años después de ese gran éxito, Podemos los ha perdido todos al no haber logrado, ni siquiera, el 3% de los votos en ninguna de las circunscripciones.

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Juantxo López de Uralde, diputado de Unidas Podemos.

La caída en picado de Podemos sigue en el País Vasco

Ya en el pasado mes de mayo, esta misma formación se quedó fuera de las cámaras regionales de Madrid y de la Comunidad Valenciana. A esto se sumó que los comicios autonómicos le dejaron con una escasa presencia en Asturias y Baleares.

Ni siquiera la incorporación de Juan López de Uralde como cabeza de lista en Álava, político ampliamente conocido por sus ideales ecologistas y natural de San Sebastián, ha logrado frenar el hundimiento de Podemos, que ha vuelto a evidenciarse en su propia tierra.

Sus actuaciones anticaza y ecologistas

Respecto a esta personalidad pública de la esfera política, cabe recordar cuando fue protagonista de un comentario machista que recorrió todo el país. A principios de 2022, el diputado de Podemos y fundador de Alianza Verde expuso sus ideas anticaza en una pregunta registrada en el Congreso de los Diputados.

En dicho texto tachaba a las cazadoras españolas como «mero elemento folclórico». Además de esto, también le dedicó al sector cinegético un ataque directo afirmando como «evidencia que el lobby sigue nervioso por la pérdida acusada de licencias de caza y, por tanto, de peso representativo para seguir presionando a las administraciones públicas en favor de sus aberraciones».

De igual modo, López de Uralde se unió al medio centenar de ecologistas que, en abril de 2022, protestaron contra el cambio climático a las puertas del Congreso de los Diputados.


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Formó parte, por lo tanto, de una escena en la que arrojaron pintura roja en las escalinatas y en las columnas de la fachada principal del edificio. El fundador de Alianza Verde, respecto a ello, valoró entonces que «el cambio climático es gravísimo y hay que actuar». «Es una acción no violenta, yo lo he hecho en muchas ocasiones, y me parece que es adecuado».

Ahora, este perfil ecologista y anticaza ha sido el líder de una formación que, en la región que le vio nacer y meses después de demostrar su constante y notoria pérdida de apoyo en el país, se ha quedado fuera de otro parlamento autonómico.