Un equipo de paleontólogos del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) ha hecho posible este nuevo descubrimiento. Se llama Dama celiae y vivió en el río Manzanares hace entre 200.000 y 300.000 años. Es una especie de gamo cuya presencia se remonta al Pleistoceno Medio.
Sus fósiles han sido descubiertos en Madrid, en las terrazas del Manzanares, concretamente en los yacimientos de Pedro Jaro I y Orcasitas. Al trabajo de los paleontólogos se unió el de un grupo de arqueólogos del Museo Arqueológico Nacional (MAN) y de la Universidad Complutense de Madrid.
De este modo, han confirmado la presencia de industria lítica achelense. Esto ha supuesto la corroboración de que la especie convivió con las poblaciones que habitaban en aquella época la zona.
La última especie de gamo antes de la reducción de puntas de las astas
Por lo observado en los fósiles recuperados, esta especie podría ser la última de un linaje de gamos que disminuyó el número de puntas de las astas de lo machos, pasando de cuatro a dos. En la actualidad, estas astas son más complejas y una de las cuatro puntas ha pasado a ser una parte aplanada y grande, lo que conocemos como la ‘pala’.
Por su parte, Jan van der Made, investigador del MNCN, ha explicado este asunto: «Las principales características que les diferencian de otras especies de su género residen en las astas. Presentan una punta anterior y la parte posterior, que se dirige hacia fuera y al final de nuevo hacia atrás, terminando en punta, sin aplanamiento».
Han sido las marcas de corte halladas en los huesos las que sugirieron que la especie pudo ser cazada y consumida por las poblaciones anteriores a los neandertales. Desarrollaron la industria lícita achelense encontrada en los mismos niveles de estos y en otros yacimientos de los valles del Manzanares y el Jarama.
José Yravedra, investigador de la Universidad Complutense de Madrid, ha apuntado que «este estudio ha sido especialmente enriquecedor porque hemos trabajado personas ligadas a diferentes disciplinas científicas como son la paleontología y la arqueología. Eso siempre aporta diferentes visiones».
Otras especies encontradas recientemente
Los últimos años han estado marcados por la recuperación de otras especies fósiles de cérvidos halladas únicamente en el valle del Manzanares. Aquí cabe mencionar el caso de Megaloceros matritensis o Haploideceros, solo encontradas en cuatro yacimientos de España y el sur de Francia.
«El hecho de que haya tantas especies raras en este valle indica, o bien que había muchos endemismos en la zona provocados por unas características ambientales muy diferenciadas del resto de Europa, o que estas especies han sido descritas y nombradas recientemente y todavía no han sido reconocidas en otras partes de Europa», concluye Van der Made.