El profesor del departamento de Botánica, Ecología y Fisiología Vegetal Carlos Rouco Zufiaurre y el profesor del departamento de Sanidad Animal Ignacio García Bocanegra -ambos de la Universidad de Córdoba- han demostrado a través de un estudio la presencia por primera vez de una variante del virus de la enfermedad hemorrágica vírica del conejo (EHV) en la liebre ibérica. Aunque a priori el hecho ha preocupado a los cazadores, que ya vimos cómo la mixomatosis mermó las poblaciones de liebre de numerosos cotos de caza, Jara y Sedal ha podido hablar con uno de los investigadores -García Bocanegra- quien ha llamado a la calma.

«Para nada tiene que ver la con lo que ha pasado con la mixomatosis»

La nueva variante apareció en 2010 en Francia y en menos de cinco años se extendió por todo el mundo. El agente infeccioso -el Lagovirus europaeus/Gl2- tiene una gran capacidad de recombinar con otros virus de su mismo género. A pesar de que en noviembre de 2020 identificaban al sur de Cataluña un ejemplar de liebre afectada por la enfermedad hemorrágica del conejo, García Bocanegra asegura que «no es algo ni mucho menos alarmante». «Al menos por lo que hemos visto hasta ahora», advierte.

Según el investigador, «para nada tiene que ver con lo que ha pasado con la mixomatosis. Era un virus de nueva variante pero típico de conejo. No se observó ninguna mutación ni que hubiera habido cambios en el genoma», ha añadido por lo que espera que de momento si aparece de nuevo sea como «brotes esporádicos».

Así es el EHV

La enfermedad hemorrágica vírica del conejo es una enfermedad viral altamente contagiosa a menudo mortal para estos mamíferos. Se caracteriza por causar una neumonía y hepatitis hemorrágica severa, pudiendo afectar también a otros órganos como riñón y corazón. Fue descrita por primera vez en 1984 en China y está causada por un Calicivirus, del género Lagovirus, con una rápida propagación a nivel mundial.

La enfermedad fue detectada por primera vez en España en conejos domésticos en 1988. En conejos silvestres, la enfermedad apareció durante la primavera de 1990 y en sólo dos años el virus se extendió por todo el país. Puede trasmitirse de unos ejemplares a otros prácticamente por cualquier vía, sin necesidad de que intervengan vectores biológicos.