España acoge miles de batidas y monterías todos los fines de semana durante la temporada de caza. El número de accidentes que se producen es realmente bajo, puesto que las normas de seguridad se cumplen escrupulosamente en la inmensa mayoría de los casos.
Cuestiones como no disparar al viso, asegurarse de enterrar la bala cada vez que se aprieta el gatillo o no situar puestos en línea son reglas de oro que evitan que se produzcan accidentes y garantizan que todo se desarrolle según lo deseado. El cumplimiento de estas reglas se debe aplicar con especial celo si hablamos de cortaderos, que suelen ser franjas de monte limpias generalmente en línea recta, donde el ángulo de tiro puede estar al límite para no alcanzar a un compañero. El siguiente vídeo, es una buena muestra de ello.
Fue filmado en Suecia por un cazador aficionado a grabar sus jornadas cinegéticas que comparte normalmente en su blog, llamado Jaktbloggen y se ha vuelto viral después de que una cuenta de Instagram alemana lo compartiese.
En él se ve cómo un jabalí aparece en escena y el cazador, aprovechando que el animal se para en mitad del claro, dispara. A pesar de que el lance a priori no entrañaba peligro –ya que la bala debería haberse enterrado–, se puede apreciar el impacto de varios fragmentos del proyectil sobre el agua de un lago que hay detrás.
El autor del disparo explica qué ha sucedido
Según ha declarado el autor del vídeo y del disparo –se grabó a sí mismo– el tiro fue realizado desde una torreta con un rifle del calibre .308 Win y con una bala semiblindada de punta redondeada con la camisa soldada al núcleo de plomo. «Si miras el clip completo, verás que la bala claramente cambia su línea al llegar al jabalí», ha manifestado el autor de Jaktbloggen.
¿Cómo puede haber sucedido esto? Probablemente el carácter semiblindado del proyectil haya provocado que la bala no se haya deformado correctamente cediendo toda su energía en el interior del jabalí. Claramente se puede apreciar cómo el proyectil alcanza la parte alta del animal abatiéndolo, pero se fragmenta tras golpear una parte dura como la columna –o con una piedra que haya encontrado en el suelo–.
Por qué debe extremarse la seguridad en los cortaderos
Muchos de los cazadores que han visto el vídeo han recordado lo peligroso que puede ser disparar en un cortadero si no se hace correctamente. Como todo buen montero sabe, nunca se debe hacer en línea con otros puestos, siempre a res pasada -si estamos colocados pegados al monte que baten los perros y de donde vendrán los animales- o bien nada más salir de la espesura -en caso de estar colocados de espaldas a la mancha-.
Aunque los veteranos orgánicos saben muy bien cómo colocar los puestos para que no haya peligro e incluso ya algunas fincas han fabricado caballones de tierra para aumentar la seguridad en este tipo de armadas, en otros lugares debe ser el montero quien juzgue el lance y no dispare si hubiera una mínima posibilidad de rebote.
El vídeo que te mostramos a continuación muestra precisamente eso, una fragmentación de la bala o rebote en ángulo que muchos, de no ser por estas imágenes, no creerían que puede suceder. Sirvan estas para concienciarnos de elegir adecuadamente la munición a la modalidad y especie que cazamos y evitar disparos en lugares comprometidos.
