El cazador pacense Carlos Mateos, de 23 años de edad, abatió en el anochecer del pasado viernes 21 de agosto un descomunal jabalí en un coto privado de la Sierra de San Pedro (Badajoz). El animal le sorprendió en esta atípica jornada cinegética, ya que no era su objetivo, según explica el joven en declaraciones a Jara y Sedal.

«Cogí el rifle por si aparecía algún zorro, aunque mi objetivo era localizar el paso de las palomas, ya que al día siguiente comenzaba la media veda. Me senté en un balcón desde el que se controla gran parte del coto», recuerda. Carlos iba armado con su rifle Bergara Scout en calibre .308. En ese momento, sin esperarlo, le entró el tremendo jabalí: «No me lo creía. Sabía que podría entrarme algún jabalí, pero no un macareno de dimensiones tan grandes», asegura.

Eran las 21:00 horas de la noche aproximadamente cuando el verraco entró delante de él: «Era increíble, pesó 124 kilos y sus navajas han sido medalla de plata con 106,5 puntos», según el taxidermista al que ya ha llevado el trofeo.

Un certero disparo para abatir a este viejo ejemplar

Más imágenes del enorme jabalí. / C.M.

El lance fue «rápido pero intenso», asegura el cazador. «Llevaba un rifle .308, y por la magnitud del animal creía que no podría con él, pero finalmente apunté a la zona del cuello y el jabalí cayó con un rápido disparo en ese lugar», relata Carlos, que tiene junto a unos amigos la gestión de este coto extremeño, especialmente destinado para caza menor, «aunque también lo explotamos para algunos buenos cochinos que aparecen, como este», comenta.

También relata, como curiosidad, «que el jabalí ya tenía el pelo de otoño”, algo que impresionó al joven.

Dos cazadores van de espera y un descomunal jabalí se coloca a sus espaldas sin que ellos se enteren

Dos cazadores van de espera y un descomunal jabalí se coloca a sus espaldas sin que ellos se enteren
Julio, con el enorme jabalí. / J.T.

El cazador ciudadrealeño Julio Bernardino, de 37 años de edad y natural de la localidad de Almuradiel, aprovechó hace unos días la luna llena que había para dar caza a un descomunal jabalí junto a su cuñado.

Todo comenzó unos días previos a la luna llena de agosto, cuando el cazador localizó una baña «bastante tomada» en una finca abierta en la provincia de Ciudad Real. Julio observó la huella de un jabalí de gran porte que entraba a desparasitarse. Te lo contamos en este enlace.

Caza un viejo jabalí de casi 150 kilos tras 7 noches de espera en Córdoba

Caza un viejo jabalí de casi 150 kilos tras 7 noches de espera en Córdoba
El enorme jabalí. / J.C.

«Han sido siete noches de espera las que hemos estado detrás de él y también hemos dejado pasar jabalíes imponentes por hacernos con este, pero la verdad que ha merecido la pena», comienza relatando el cazador a Jara y Sedal. Te lo contamos en este enlace.