Las redes sociales tienen un alcance casi inimaginable y es por eso que, comúnmente, se utilizan como herramientas de expresión. Esto ocurre, sobre todo, con asuntos que queremos que lleguen a las máximas personas posibles. En esta ocasión, un ganadero de Cantabria ha hecho uso de ellas para dirigirse a la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.

«Si escribiese todo lo que se me pasa ahora por la cabeza sobre la ministra Teresa Ribera y los chupócteros de supuestos representantes políticos que tenemos en el Gobierno y alrededores, me censurarían en menos de cinco minutos la página».

Así es como empieza la carta que dicho ganadero le ha querido hacer llegar a Ribera. ¿Por qué? Ninguna tontería. El potro que se ve en las imágenes ha sido devorado por unos lobos en la finca en la que se encontraba el animal.

«365 días trabajando con ellas y esperando con ilusión una nueva cría para que en menos de 48 horas te encuentres este panorama al despertar. La ley de bienestar animal lo llaman los entendidos», lamenta en el texto.

De igual modo, ha querido matizar que «no es el valor del potro ni todo el sacrificio y esfuerzo que hay detrás, el disgusto de encontrarte con tu animal así no hay dinero que lo compense. ¡No queremos limosnas, queremos nuestros animales vivos!».

En 2021 se incluyó el lobo ibérico en el LESPRE

El lobo ibérico fue incluido, en 2021, en el Listado de Especies Protegidas (LESPRE). De igual modo, a principios de este año, el Gobierno de Cantabria anunció un incremento de las indemnizaciones por daños de la fauna silvestre a las producciones del sector primario.

«Podéis meteros los 400 euros, que cobraremos con suerte en año y medio por el gran funcionamiento de la administración, por donde os quepa», continúa refiriéndose a dicha indemnización.

«’Salvasteis’ al lobo, pero acabasteis de matar al sector primario, a la España rural y sobre todo a los que seguimos teniendo ilusión por vivir en los pueblos con nuestro ganado», ha criticado.

«Solo queremos un plan de gestión para evitarlo»

«Menos de dos años más tarde las consecuencias han estallado. Nunca quisimos la erradicación de la especie, tan solo un plan de gestión para evitar precisamente lo que avisamos que pasaría. En la misma noche de hoy han matado nuestro potro, a otros amigos un potro quinceno al lado, sumado a más ataques en Horna, Santiurde, Aradillos, Retortillo… Hace una semana mataron tres ovejas en la gasolinera de Bárcena, ¡en la gasolinera del pueblo! A este ritmo, el próximo 6 de mayo los corrales de la feria tendremos que llenarlos de cadáveres», sentencia el ganadero.

Aparentemente dolido por lo ocurrido, en el texto deja constancia de «esa sensación de rabia e impotencia, de no poder hacer nada porque en este maldito país y su equitativa justicia vale más la vida de un lobo/oso que la de una persona. Qué triste que las sanciones y penas de cárcel sean mayores por matar a un animal que por asesinar o violar a una persona».

«La unión de todo el pueblo y la defensa de lo de uno, porque nadie va a sacar la cara por lo nuestro y menos desde un sofá de Madrid donde nos imponen cómo vivir», continúa denunciando.

«El que a hierro mata, a hierro muere», concluye el ganadero en su carta, evidentemente cabreado y afectado a partes iguales por la desgracia provocada por las incompetentes decisiones del Gobierno.