La Asociación de Rehalas Regionales (ARRECAL) ha propuesto al Ministerio de Ione Belarra una enmienda a la totalidad de la Ley de Protección, Derechos y Bienestar Animal. Para plantearla en la práctica ha aprovechado el trámite de consulta pública.

A pesar de que los perros de caza quedaron finalmente excluidos del ámbito de aplicación de esta norma administrativa, la misma suerte no le ha llegado a la modificación del delito de maltrato animal.

Tal y como han venido advirtiendo desde ARRECAL desde el principio de este «proceso de equiparación jurídica de los animales con las personas», las normas transgreden el principio de seguridad jurídica. De igual modo, contiene penas y sanciones desproporcionadas y, en el caso concreto del Código Penal, refleja una vulneración del principio de intervención mínima que rige en esta materia.

En este sentido, la asociación ha denunciado que la reforma del Código Penal, de aplicación desde el 18 de abril de 2023, «estira de forma irracional el ámbito de aplicación de este delito». Además, ha añadido que «multiplica las penas aplicables y genera un riesgo inaceptable para los particulares que entran en prisión por conductas que realmente no resultan graves a los ojos de la mayoría de la sociedad».

ARRECAL asegura que la Ley de Bienestar Animal es un nuevo ataque a la caza

Siguiendo la misma línea, ARRECAL avisa de que el desarrollo de la Ley de Bienestar Animal de Belarra y su creación de numerosos y novedosos organismos de corte animalista, «es una vuelta de tuerca en la ofensiva de esta ideología radical contra la caza».

El presidente de ARRECAL y de la Oficina Nacional de la Caza (ONC), Felipe Vegue, ha denunciado la intromisión ilegítima del Estado en una materia que está en manos de las Comunidades Autónomas. También ha puntualizado que algunas de estas autonomías «deben reflexionar sobre la necesidad de legislar sobre animales funcionales y no exclusivamente sobre mascotas».

Vegue ha hecho mención, además, al ansia de protagonismo y de control del Ministerio en manos de Unidas Podemos. Considera que su afán «ha sido poner al pie de los caballos al mundo de la caza. Tras esta falsa doctrina, hipócrita por contentar a una parte importante de su electorado en las peticiones de protección animal desde la óptica de quien no tiene trato con ellos y solo se reflejan en el comportamiento en la tenencia de mascotas, se esconde un ataque velado al mundo rural. Incidentes como el de la Feria del Perro en Archidona nos inclinan a pensar que ha empezado la caza y captura del cazador».

«Hay que enseñar los dientes»

El presidente de la asociación ha defendido la necesidad de seguir reivindicando y de aprovechar los procesos electorales nacionales y regionales para «enseñar los dientes y el músculo real de todo el sector primario a los políticos, que deberán tomar nota».

«Manifestaciones como la del 20-M en Madrid, la del 2 de abril en Navarra, la del 6 de mayo en Valencia y la del 7 de mayo en Logroño deben de actuar como vacuna para las ansias del totalitarismo y las prohibiciones que nos quieren imponer desde grupos radicales como Podemos», exponen desde ARRECAL.

Ha querido anunciar que ante el «acoso constante» a los rehaleros, será preciso tomar medidas más contundentes para que la sociedad en general entienda el carácter esencial de la caza.

«Si el acoso tiene consecuencias que afecten a nuestras familias y la forma esencial de nuestras actividades, nos obligarán a paralizar la actividad cinegética, con las implicaciones sobre daños agrarios, sanidad animal, salud pública o equilibrio de la biodiversidad, y seguridad vial que ello supone».

«No vamos a claudicar. Ni vamos a permitir que unas minorías acaben con nosotros», ha sentenciado Felipe Vegue.