Colectivos animalistas está promoviendo entre sus personas afines y grupos en redes sociales una campaña para localizar rehalas y difundir su ubicación exacta, con el fin de que se puedan realizar denuncias masivas.
Tras la enorme polémica generada por la tramitación de la ley animalista, que ha enfrentado a los socios de Gobierno PSOE y Unidas Podemos, el animalismo en España trata de unirse para conseguir por todos los medios que la Ley de Bienestar Animal incluya a los perros de caza. Todo ello, después de que el diputado y portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Patxi López, compareciera en septiembre para asegurar que los animales auxiliares para la caza quedarán fuera de la ley animalista.
Ante esta tesitura, grupos animalistas ha puesto en marcha un formulario al que ha tenido acceso Jara y Sedal para que sus colaboradores lo rellenen y faciliten la ubicación de las rehalas que conocen.
¿Qué se pide en el formulario difundido por los animalistas?
En el formulario se pide el nombre y apellidos del informante, su teléfono móvil, el nombre de la asociación a la que se pertenece -si procede-, así como la ubicación exacta de la rehala en cuestión. También animan a indicar el número de perros aproximado y el estado general de estos.
Con la información recabada, tratarán de elaborar un mapa con el que desvelarán a sus colaboradores la ubicación de todas las rehalas de España. Su fin es el de facilitar las denuncias masivas hacia el colectivo cazador.
«Los animalistas ya se quieren comportar como una policía política»
Felipe Vegue, presidente de la Asociación de Rehalas, ha denunciado en declaraciones a este medio que «todavía no ha entrado en vigor la Ley de Bienestar Animal y los animalistas ya se quieren comportar como una policía política, criminalizando a las rehalas, persiguiéndolas». «Es cierto que hay una avalancha animalista en contra del sector cinegético, y la parte más débil es la de las rehalas. Estamos viendo además una especie de policía animalista que nos está persiguiendo, controlando», expone.
«Creen que la nueva ley les dará derechos para controlar al sector rehalero», sigue denunciando. Y pone en valor que «todos los perros de los rehaleros pasan unos controles súper exigentes». «Los animalistas pretenden que esta ley otorgue al animal los mismos derechos que las personas, cuando es imposible que los tengan y los puedan ejercer, y además se olvidan de las desigualdades de la sociedad real», concluye Vegue.
