Miles de tractores han comenzado a bloquear autopistas y puntos estratégicos de los Países Bajos con el objetivo de paralizarlos. El mundo rural holandés está protestando así por una nueva legislación medioambiental, la cual, según denuncian los colectivos de agricultores y ganaderos del país, pone en riesgo la continuidad de sus granjas.

En concreto, la nueva ley prevé una reducción de hasta un 70 por ciento de las emisiones de nitrógeno, una imposición que los colectivos de ganaderos ven imposible de compaginar con el funcionamiento habitual de las explotaciones rurales. Según el propio Gobierno, cerca de un 30 por ciento podrían cerrar. Además, esto lo lleva a cabo en medio de una brutal crisis energética, lo que ha hecho estallar a los ciudadanos.

El siguiente vídeo muestra cómo este martes durante una manifestación de agricultores en la localidad de Heerenveen la policía hizo disparos de advertencia y terminó utilizando gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.

A lo largo de la mañana de hoy los momentos de tensión se han vivido por todo el país. No solo se han cortado autopistas o accesos a centros logísticos, también han llegado a bloquear las puertas de algunos aeropuertos como el de Groningen, como se ha podido ver en multitud de vídeos subidos a través de las redes sociales.

Hay que tener en cuenta que Holanda es uno de los mayores exportadores de productos agrícolas del mundo. En 2021, el país exportó productos por valor de alrededor de 105 millones de euros. Sin embargo, no ha cumplido con las exigentes normas europeas de emisiones durante décadas, algo a lo que tampoco parecen estar dispuestos ahora.

Los ganaderos ya esparcieron estiércol frente a la casa de una ministra ecologista en Holanda

Tal y como narramos en este medio este martes, los ganaderos del país esparcieron estiércol frente a la casa de una ministra ecologista. En concreto, varios protestantes llegaron a vaciar un tanque de estiércol frente al domicilio de la ministra de Naturaleza y Política de Hidrógeno, Christianne van der Wal, ante la crisis del sector.