El diario El País sólo se hizo eco de la concentración de Galicia, a pesar de que 100.000 personas de toda España se manifestaron en más de 40 ciudades, y aseguró que los cazadores llevaron armas, algo ilegal y «falso», según la organización.
11/4/2018 | Redacción JyS
100.000 ciudadanos salieron ayer a las calles de toda España para exigir respeto a la caza y a los cazadores y para pedir que no se criminalizase a este colectivo, formado por un millón de personas en España. El mensaje iba dirigido a la clase política, a las administraciones y también a los medios de comunicación generalistas, los cuales a menudo se hacen eco de las informaciones lanzadas desde los colectivos animalistas y diseñadas para alimentar el odio a estos ciudadanos.
Pero a pesar de que la cobertura mediática del evento ha sido muy alta –la práctica totalidad de medios nacionales, regionales y locales se hicieron eco de las diferentes movilizaciones– la información publicada por el diario El País ha generado una profunda indignación en el sector cinegético por el tratamiento informativo. El diario nacional sólo hizo referencia a la protesta de Santiago de Compostela en su sección digital de Galicia, obviando que se trataba de un asunto nacional que había sacado a la calle a más de 100.000 ciudadanos en total. «Desde la Real Federación Española de Caza le enviamos convocatoria de prensa, igual que al resto de medios nacionales, que sí se hicieron eco de las protestas en toda su extensión», confirma a Jara y Sedal Ángel López Maraver, presidente de la RFEC.
Pero, según asegura Maraver, lo que más ha indignado a los cazadores no ha sido el vacío que El País ha hecho a lo que estaba sucediendo en toda España sino a una de las frases que incluía en el cuerpo de la noticia, donde afirma que los manifestantes acudieron «portando sus armas reglamentarias, en algunos casos». Apoyando su titular, muestra a uno de los manifestantes con una pieza de madera que simula la forma de una escopeta. «Esto es rotundamente falso. Ningún cazador portaba ningún arma. Hacer eso es ilegal y, además, atenta contra el sentido común. Nadie se va a una manifestación con un arma», asegura Fernando Álvarez de Sotomayor, quien fue el encargado de leer el manifiesto en defensa de la caza en Santiago de Compostela.
Al margen de que los cazadores no posean «armas reglamentarias» –esto está reservado en exclusiva para los cuerpos y fuerzas de seguridad–, la noticia de El País ha sido interpretada como una expresión de lo que precisamente denunciaban ayer 100.000 personas en toda España: la criminalización mediática de un colectivo respetuoso con la legislación y necesario para el medio rural y el medio ambiente.
