Seguro que no sorprende a nadie la realidad de que el tiempo puede convertir a las personas en otras completamente diferentes a las que nunca habían podido imaginarse. Este, precisamente, es el caso de algunas de las que están haciendo cada vez más extendido el fenómeno del que hablamos. Animalistas veganos que empiezan a ser cazadores. Parece impensable, pero es algo que está ocurriendo y lo hace a nivel internacional.
Son individuos que se oponían rotundamente a la caza e, incluso, participaban en la irrupción de actividades cinegéticas cada fin de semana. La vida cambia y las personas aún más. Quizá fue de la noche a la mañana o quizá fue un largo proceso, el tema es que comenzaron a comprender que esta práctica no era la crueldad personificada, al contrario de lo que habían pensado durante muchos años.
La conversión de anticaza a cazador se extiende por Europa
Podemos encontrar ejemplos de casos de auténticos anticaza que, por alguna razón, decidieron convertirse en cazadores en diferentes países de Europa. Son el vivo ejemplo de que este fenómeno se está extendiendo por cada vez más territorios.
Hablamos, por ejemplo, de Francia. Su nombre es Aimy Giverdon, tiene 29 años y trabaja en un local de comida rápida. En el año 2019 se unió al grupo anticaza AVA con el objetivo de conseguir la prohibición de la caza y, finalmente, decidió hacerse vegana. En este grupo permaneció durante 4 meses, tiempo tras el cual se dio cuenta de la «manipulación» a la que los estaban sometiendo.
«Muchas veces los comparo con una secta». Estas duras palabras fueron mencionadas por Alexis Barbier, exlíder de la sección contra la caza. En ambos casos, se decantaron por abandonar el activismo y se convirtieron en cazadores.
Alemania, el país en el que cambiar el veganismo por la caza se ha puesto de moda
Otro de los países europeos en los que se ha hablado mucho sobre este fenómeno es Alemania. Aquí podemos mencionar la historia de Christopher Stoll, un joven de 29 que vive cerca de Berlín. Su interés por la caza no le viene de nacimiento, sino que fue resultado de plantearse si el consumo de carne era para él.
Con el fin de darse una respuesta a sí mismo, Stoll se planteó que si podía matar a un animal, entonces también podía comérselo. Por el contrario, si no podía, basaría su alimentación en una dieta vegana o vegetariana. Fue así como comenzó a ser cazador.
Una anticaza que se convierte en cazadora por amor en España
Más de una vez hemos escuchado eso de que el amor está presente en todos los aspectos de nuestra vida. Pues bien, también lo está en la caza. No tenemos que irnos muy lejos para conocer la historia de Raquel Soriano, anticaza y defensora del medioambiente. Probablemente, quienes la conocían bien no imaginaban el cambio que iba a dar su vida.
Un día, su camino se cruzó con el de Javier Vidal, un cazador valenciano. Su historia, a simple vista, no parecía tener mucho futuro, pero al final va a ser verdad eso que dicen: «El amor todo lo puede».
Consiguieron dejar sus diferencias a un lado y dar vía libre a sus sentimientos. Al principio, ni siquiera podían mantener conversaciones sobre caza, pero el tiempo hizo cambiar de opinión a Raquel. Tanto fue así que, tras acompañarle a alguna de sus batidas, a día de hoy es una amante del mundo cinegético. Incluso tiene su propio rifle de camuflaje rosa.
Es uno de los claros ejemplos de que, en la vida, no podemos ni imaginarnos mínimamente cómo todo puede cambiar por completo, incluidos esos principios que creemos inamovibles.