Un humilde cazador de Valencia orgulloso de usar «una de las municiones más barata del mercado» ha narrado a Jara y Sedal cómo consiguió cazar el pasado fin de semana tres magníficos jabalíes en espera.
31/5/2019 | Redacción JyS
El valenciano Javier Vidal García, de 35 años de edad, no podía creer lo que le había sucedido el pasado fin de semana. La suerte estuvo de su parte y logró abatir, en tan sólo dos días, tres monstruosos jabalíes en espera. Lo más relevante del hecho es que dos de las piezas han sido finalmente medalla de oro.
El domingo, 26 de mayo, se hizo con la más destacada de las piezas, que fue medalla de oro con 125 puntos, logrando esa noche también otro jabalí destacado pero sin llegar a ser medallable; el sábado, día 25, Vidal lograba cazar otro medalla de oro con 111 puntos. Además, se da la casualidad de que hace justo dos años, en el mismo puesto, también Vidal abatió otro jabalí con 118.
Según relata el propio cazador, el coto donde consiguió la hazaña está ubicado en las cercanías de la localidad valenciana de Bolbaite, concretamente en los alrededores del Lago de Anna. «En él llevamos cazando tres años en modalidad de espera, y concretamente desde hace dos en el mismo puesto». Ese día vieron «que no entraba nada que valiese la pena». «Fue una sorpresa», confiesa.
Dos monstruosos jabalíes en el mismo puesto
El más destacado de los tres jabalíes abatidos por Vidal el pasado fin de semana llegó en la noche del domingo, consiguiendo un ‘orazo’ de 125 puntos. El cazador ha relatado a Jara y Sedal el emocionante momento en el que lo abatió: «Estaba con mi compañero en el coto y planteamos hacer una espera», ha comenzado explicando.
Antes de ponerse, revisaron las cámaras y los cebaderos a ver qué estaba entrando: «Cuando nos colocamos, íbamos con la idea de ver animales comer porque no tiramos a cualquiera… pero las circunstancias nos acompañaron», admite.
Javier Vidal se apostó en un puesto «bastante distanciado» de su compañero sobre las 20:00 horas. Alrededor de las 0:15, escuchó «ruidos» a izquierda y derecha. «Poco a poco vi cómo varios jabalíes iban arrimándose al cebadero y… ahí estaba», narra.
El cazador optó entonces por encender la linterna pero vio al animal «de culo». Segundos después apretó de nuevo el pulsador y tuvo suerte. «Cuando volví a encender la linterna, ya estaba colocado», asegura. De un certero disparo tumbó al suido. En total, 92 kilos de jabalí conseguidos con su rifle Browning calibre .300 Winchester Magnum y munición Sellier & Bellot. «De las más baratas del mercado, pero a mí me vale y espero no dejarla nunca», afirma Vidal. Finalmente el animal alcanzó los 125 puntos CIC tras pasar por el taxidermista.
Esa misma noche también se hizo con otro jabalí «que tenía 15 centímetros de colmillos», lo que confirma el espectacular fin de semana para este joven de 35 años. Además, un día antes, el sábado 25 de mayo, Javier Vidal cazaba otro jabalí que también ha sido medalla de oro con 111 puntos.
«El presidente del coto vio lo que había conseguido y quedó asombradísimo, se quedó blanco de lo que había abatido» ya que «no es un coto conocido ni de renombre, pero me tocó la varita mágica ese fin de semana», asegura.