Este joven, con la voz entrecortada por el dolor tras haber perdido a ocho de sus perros en menos de un mes, narra a Jara y Sedal cómo ha sido la pesadilla que ha vivido: «Estoy destrozado; ni yo ni mi familia tenemos vida».
24/9/2019 | Redacción JyS
El joven cazador ciudadrealeño Alberto González Casero, de 24 años de edad y natural de la localidad de Villanueva de los Infantes, está «completamente destrozado». Hace un mes que le robaron cinco perros de caza en su finca familiar y, este fin de semana, le han envenenado otros cinco, de los cuales han fallecido tres. Los otros dos se encuentran en estado grave en el veterinario, pero González no pierde la esperanza y espera que se recuperen.
Casero ha asegurado a Jara y Sedal que ha interpuesto hasta tres denuncias en el cuartel de la Guardia Civil de su pueblo y que están sobre la pista de algunos sospechosos. «El Seprona ya está investigando los hechos, aunque es muy difícil. Mi familia y yo nos hemos recorrido todos los rincones en los que creíamos que podrían estar. Hemos ido incluso a zonas de Madrid por si encontrábamos alguna pista, pero nada…», asegura con la voz entrecortada el cazador manchego.
Así sucedió todo
El pasado 22 de agosto Casero estaba paseando a una de sus perras cuando vio un coche salir «a toda velocidad» de su finca. Eran las 22:30 horas. Cuando llegó le faltaban tres de sus canes: «Se llevaron una perra de liebre y dos cachorros cruzados hijos de ‘Chocolate’, el campeón de España», relata a este medio. Una semana después le quitaron dos perras más, una de ellas con gran valor, pues había quedado tercera en el campeonato de España de galgos en campo con liebre mecánica en la modalidad de 800 metros.
Por si fuera poco, el pasado sábado 21 de septiembre envenenaron otros cinco perros del joven. De ellos, tres murieron «en apenas unos minutos». «Fue una desesperación ver cómo a los diez minutos murió un perro delante de mí, a los veinte minutos el segundo y luego el tercero. No sabía ni dónde meterme. Estaba y estoy destrozado», relata Alberto, que explica a este medio que los dos canes que no murieron al instante están graves pero con posibilidad de salvarse. El veneno, según confirma el joven, lo vertieron en «pequeñas bolsitas que los animales se tragaron en el momento».
Otro caso de robo reciente
El pasado 20 de agosto el cazador sevillano Antonio Moral narró a Jara y Sedal el «calvario» que estaba pasando después de que le robaran sus siete podencos de caza de su finca de la localidad de Salteras (Sevilla). «Rompieron los candados y rajaron las vallas», relató sobre lo sucedido, para lo que pidió colaboración de todo el sector cinegético por si tienen alguna pista del paradero de sus canes. Esto es lo que contó el cazador a este medio.
