La Ley de Bienestar Animal del Gobierno ha salido adelante finalmente excluyendo a los perros de caza este jueves 9 de febrero en el Congreso de los Diputados después de que Unidas Podemos haya incumplido su promesa y haya votado a favor de ésta.
Tras la votación, Jara y Sedal ha podido recoger las declaraciones de Manuel Gallardo, presidente de la Real Federación Española de Caza, frente al Congreso: «Los resultados han sido ajustados, pero el objetivo que nos habíamos marcado desde el sector cinegético de que los perros de caza quedaran fuera de la ley, porque no pueden ser tratados como mascotas, lo hemos logrado. Por lo que desde esa perspectiva tenemos satisfacción», indicaba. Y ha agradecido al PSOE que haya mantenido su palabra en cuanto a la enmienda que planteó para sacar a los canes de caza y de trabajo de la norma: «Agradecemos también al PP, PNV y Vox que apoyaran la transaccional que hoy ha visto la luz», ha señalado citando también a los animales en el deporte que han sido excluidos.
«Queda aún un recorrido largo»
«Tenemos satisfacción por nuestra parte; nos hubiese gustado que esta ley no hubiese visto la luz y que hubiese tenido una participación social mayor», indicaba. Y recordaba que no se les dejó participar en ella: «Es más, se nos prohibió la entrada por parte del dimisionario director general de Derechos de los Animales, y digo dimisionario porque supongo que dimitirá. Es una ley que nace fallida, pero creemos que es un éxito sin parangón en la democracia que al final se haya logrado que el propio Gobierno presente una enmienda a su ley, que progrese y que al final vea la luz», declaraba Gallardo.
«Ahora queda un recorrido aún largo, porque irá al Senado y también se producirán cambios en la ley. Habrá enmiendas en los partidos que tienen representación y volverá al Congreso, y volveremos a ver si Podemos sigue votando sí a la ley; nos tememos que de aquí a que vuelva del Congreso, el Ministerio de Derechos Sociales y su partido van a seguir con la campaña de demonización y criminalización del sector cinegético, intentando crear una leyenda negra contra la actividad cinegética», exponía el presidente de la RFEC.
«La única pretensión al parecer es que la caza, si teníamos que cumplir la ley desapareciera, y ahora lo que vemos es que la única pretensión que tenía este Ministerio y Podemos es mantener esa red clientelar animalista que les va a permitir, cuando pierdan las elecciones, seguir viviendo del dinero público», concluía Gallardo.