Proyecto Aristeo, formado por una organización sin ánimo de lucro que nace a partir de la alianza de un grupo de cazadores comprometidos y enfocados en promover y revalorizar la actividad cinegética, así como el Medio Natural y la conservación de éste, ha publicado un nuevo vídeo en el que desmonta los ‘mantras’ contra los perros de caza que difunde el animalismo.
«Probablemente alguna vez has escuchado que el perro de caza vive hacinado, prácticamente sin atención y en condiciones insalubres. Seguramente no seas ajeno a este mantra que circula ya desde hace años que habla de 50.000 galgos abandonados cuando termina la temporada de caza. Es posible que hayas leído en determinados medios que maltratamos e incluso acabamos con la vida de nuestros perros; muchos aseguran que para nosotros son simples herramientas y que los desechamos cuando son mayores y ya no los necesitamos», comienzan explicando dos cazadores en el inicio del vídeo.
«¿Te suena de algo esto, no? Pues nosotros te vamos a enseñar otra realidad, la realidad que te quieren ocultar, la que no quieres que sepas. La realidad que rige nuestra relación con ellos, la relación del perro y el cazador», señala.
«Nuestro beneficio es que nuestros perros estén mental y físicamente bien cuidados»
Rocío Bueno, cazadora y rehalera, defiende en el vídeo los cuidados que da a sus perros: «Mi perro, aparte de formar parte de mi familia, requiere de la mejor forma física para desarrollar su actividad. Es totalmente ridículo pensar que nosotros no cuidamos nuestros perros, cuando nuestro beneficio es que nuestros perros estén mental y físicamente bien cuidados».
Óscar Hernández, galguero, explica que «los galgos son animales bien cuidados tanto en España como en el resto de Europa, por eso uno de los problemas que tenemos en España es la importación que se está produciendo de estos animales al resto del continente», señala en la grabación. «Los galgueros, amamos, convivimos y respetamos enormemente a estos animales día tras día y año tras año. No creo que la cabeza de nadie pueda pensar que abandonamos a este tipo de animales, cuando son parte de nuestra familia. ¿Tú abandonarías a un miembro de tu familia?».
«¿En qué cabeza cabe que alguien que ha pasado tantas experiencias junto a esta raza pueda abandonar o maltratarla?»
Jorge Alonso, cazador y guarda rural, defiende: «Desde que tengo uso de razón, en mi vida, siempre ha habido podencos, una raza inteligente, cariñosa y que lo caza todo. Muchos de los momentos de mi vida los he pasado en el campo, con un montón de recuerdos y experiencias junto a ellos. ¿En qué cabeza cabe que alguien que ha pasado tantas experiencias junto a esta raza pueda abandonar o maltratar o colgar de un árbol o quitarle la vida a un animal con el que tiene tantas experiencias?».
Maite Cornejo, cazadora, explica que los «perros no son ninguna herramienta, sino nuestros compañeros y con los que disfrutamos haciendo cualquier actividad del día a día. Incluso Leo, que algunos días se viene a trabajar».
Álvaro Fernández, cazador, muestra a su perro de caza con catorce años de edad: «Está jubilado de la caza desde hace tres y mi ojito derecho. Y seguimos disfrutando de nuestros momentos, compartiendo paseos a su ritmo todos los días, porque ya le va costando. Nos dan tantísimo, son tan nobles, es tan alta su fidelidad… que es ridículo pensar que cuando lleguen a cierta edad nos vamos a deshacer de ellos. El binomio entre un cazador y un perro es inquebrantable y no lo va a romper la edad ni nada».
