Este pescador se levantó a las cuatro y veinte de la madrugada y se puso a pescar a las seis y media, pero el esfuerzo tuvo recompensa: pescó el campanu 2020 de Asturias y donará el dinero de su subasta a la lucha contra el cáncer.
El pescador ovetense Íñigo Fernández Amantegui ha logrado capturar el campanu 2020 en una jornada en la que aplazó una operación para poder acudir al río. Además, ha donado el pez para la lucha contra el cáncer, según ha desvelado el protagonista en una entrevista con El Comercio.
«Todos los días cuando me levanto pienso en el salmón. Soy un obsesionado de ello. Por eso cuando se confirmó la fecha de inicio de la temporada, el día de la gloria, llamé al Instituto Oftalmológico Fernández-Vega para posponer el paso por el quirófano para operarme de cataratas», señala el pescador al citado medio.
Aquel día se levantó a las cuatro y veinte de la madrugada y se puso a pescar a las seis y media. «Me gusta organizar las cosas con tiempo y ese día acudí acompañado de un amigo y mi sobrino», sigue contando el pescador, que obtuvo quizá la picada más importante de su vida con este salmón.
Después de estar suspendida la tradicional subasta del campanu por las medidas de prevención frente al coronavirus, el dinero que obtenga con la venta del ejemplar lo donará a la Asociación Galbán, que ayuda a las familias de niños y adolescentes afectados por el cáncer en Asturias.
Una afición desmesurada
Íñigo Fernández Amantegui destina sus ahorros a viajar para tirar la caña en aguas noruegas, islandesas y rusas. Según sigue confesando a El Comercio, la pesca, el trabajo y la familia son las tres ramas en las que divide su vida y fuera de temporada mantiene su preparación de lance de caña de mosca.