El periodista y escritor Luis del Val, colaborador del programa Herrera en COPE, protagonizó el pasado 7 de octubre en la citada cadena radiofónica una crítica magistral al Gobierno ante sus pretensiones con la nueva Ley de Bienestar Animal que el pasado viernes pasó un nuevo corte con la aprobación de su anteproyecto por el Consejo de Ministros.
El escritor, en su sección ‘La imagen de Luis del Val’, analizó los distintos aspectos que esta ley traerá consigo no sólo en el mundo rural, sino también en cuanto a la ciudad se refiere. Reproducimos a continuación la intervención de Luis del Val, que no tiene desperdicio:
Esto de que cuando se apruebe la Ley no se pueda nadie comprar un perro de no tener el permiso de conducir perros me parece un avance muy importante. Bueno, yo lo llamo carnet de conducir para que se me entienda, pero se trata de un cursillo que habrá que aprobar no como en el bachillerato que no apruebas y te pasan de curso.
Cualquier hombre o mujer puede tener un hijo en España aunque tenga antecedentes penales, aunque su conducta sea antisocial sin necesidad de hacer un cursillo, pero otra cosa es que, si en vez de tener un hijo, deciden tener un perro. Ahí sí que nuestro Gobierno progresista se lo va a poner difícil, porque antes deberá asistir al correspondiente cursillo.
Y cuidado con aplicar la eutanasia a los animales: prohibido. En la España progresista, usted le puede aplicar la eutanasia a su abuelo y a su padre, pero no a su perro. Habrá multas de hasta 600.000 euros. En nuestro código penal, un homicidio por imprudencia menos grave se puede castigar con una multa de tres meses, o sea, una media de 18.000 euros, pero si es el gato te puede costar el precio de un chalet.
Claro, en esto hay lagunas: en mi urbanización veo al personal que pone sustancias con destino a liberarnos de las ratas. Espero que no nos caiga una multa de 600.000 euros. Yo mismo, al principio del verano, cuando las hormigas ya pasaron de la cocina al dormitorio decidí envenenarlas, y lo digo ahora que la ley no se ha aprobado y espero que no tenga efectos retroactivos.
Ah, y en las tiendas de mascotas no podrán vender ni una tortuga, solamente peces. ¿Y por qué los peces pueden estar encerrados en un acuario y el perro no puede estar en una terraza más de un día?
Ah, y otra animalada: como tenemos el paro juvenil más alto de Europa, a los que cumplan 18 se les regalarán 400 euros. Un empleo no, que eso es cosa de las empresas.
Si los perros votaran, Pedro Sánchez sacaría mayoría absoluta en las próximas elecciones. Yo creo que debería estudiarlo.
Puedes pulsar en el play que verás a continuación para escuchar la intervención de Luis del Val: