El cazador Víctor Manuel Vaz, natural de la ciudad cacereña de Plasencia pero que en la actualidad vive en el municipio toledano de Talavera de la Reina, abatió el pasado fin de semana una enorme perdiz de 610 gramos de peso en un coto ubicado en las cercanías de la localidad de San Bartolomé de las Abiertas, también en la provincia de Toledo.

El cazador explica que «nunca había visto» una perdiz de ese peso, abatida durante una jornada que comenzó de zorzales y que, por la poca suerte que estaba teniendo, decidió «irse a dar una vuelta al salto» al coto, cobrando la imponente patirroja.

Una mañana que comenzó sin suerte

«Jamás había abatido nada igual. Siempre habían sido normales, incluso alguna que había llegado a los 500 gramos y poco más, pero es que esta tenía más de 600», narra a la redacción de Jara y Sedal mostrando el vídeo del pesaje de la patirroja, sin duda una de las más voluminosas de cuantas hemos publicado en este medio a lo largo de la temporada.

El cazador explica que, temprano, se colocó en el puesto fijo de zorzales y, aunque abatió varios pájaros, no tuvo suerte en demasía: «Me fui por ello a dar una vuelta a la perdiz en mano; saqué dos o tres animales y vi esta, que me pareció súper grande», narra sobre un animal tras el que fue su perro, un bretón de tres años de edad y de nombre Toro.

La brava batalla que le dio la patirroja

«La levanté tres veces para poder abatirla, pegaba unos vuelos larguísimos», explica el cazador sobre la batalla que le dio el animal. Finalmente, a la tercera, fue la vencida y logró abatirla en el contexto de una mañana en la que anduvo un total de 21 kilómetros en 4 horas: «Fue una paliza, pero satisfactorio», reconoce el cazador.

Como recordábamos el pasado mes de noviembre en este medio, hacerse con una perdiz de este volumen no es fácil, ya que el alimento de esta especie es mayoritariamente de origen vegetal pero con un porcentaje no despreciable de origen animal. Es probable que este ejemplar estuviera cerca de una zona frondosa y con gran cantidad de cereal por lo que la perdiz habría estado bien alimentada en los últimos meses.

Por último, recordamos cómo mismo miércoles, publicábamos en este medio cómo el cazador Álvaro Sánchez, natural de la localidad de Sabiote (Jaén), abatió el pasado domingo, 13 de febrero, un enorme y viejo macho de perdiz de 536 gramos de peso en un coto ubicado en la localidad ciudadrealeña de Manzanares.