La Plataforma de Afectados por Parques Nacionales considera imprescindible que la Administración aclare de manera inmediata el posible uso de métodos prohibidos de control que se ha detectado en el Parque Nacional de Monfragüe, tal y como han denunciado algunas entidades.
Y es que esta Plataforma considera inaceptables las imágenes en las que se ve a un ciervo herido, desnutrido y deshidratado agonizando dentro de una jaula de las que se utilizan para hacer controles poblacionales dentro del Parque Nacional de Monfragüe, donde -como en todos los Parques Nacionales- está prohibido cazar desde el 5 de diciembre de 2020.
La Plataforma de Afectados por Parques Nacionales considera que este hecho «demuestra, una vez más, que se prohibió la caza en estos espacios sin respaldo técnico ni científico y, sobre todo, sin explicar claramente a la sociedad qué alternativas se iban a emplear para realizar estos controles».
Lo que antes era generación de riqueza y empleo «ahora será gasto público»
Esto se suma al último borrador del Plan de Control de Ungulados elaborado para el Parque Nacional de Cabañeros, que deja claro que sin caza será imposible limitar el número de ejemplares de –especialmente- muflones, gamos y jabalíes.
Según explica en nota de prensa la Plataforma de Afectados por Parques, tras prohibir la caza en los Parques Nacionales se está demostrando que la alternativa es «peor gestión y mucho menos ética», sin criterios selectivos y causando a los animales situaciones «altamente estresantes». Por eso, es importante que la sociedad sea consciente de cómo se está actuando en realidad y cómo se están causando sufrimientos innecesarios a los ejemplares para posteriormente ejecutarlos.
También se evidencia que al final, de una manera o de otra, habrá que cazar en los parques nacionales, y lo que antes era generación de riqueza y empleo por la inversión que llevaban a cabo los cazadores, ahora será gasto público.