israel hernandez

Hazlo por ti. Hazlo por los cazadores que te criaron y te entregaron el testigo de este maravilloso estilo de vida que dirige tus pasos. Hazlo por aquellos que te sucederán en los fríos días destripando terrones tras las perdices. Por los que tumbarán un cochinazo y te brindarán su éxito levantando su mirada al cielo cuando ya no pises esta tierra que ahora te sostiene.

Hazlo por aquellos que dieron su vida para que tú pudieses vivir con libertad la tuya. Hazlo por aquellos que nunca dejaron de cazar, ni aun cuando la caza estaba reservada a una élite de la que la mayor parte de ellos no formaban parte. Hazlo por los amaneceres junto a tu padre. Hazlo por la cara de felicidad de tu perro cuando huele tus botas y tu chaleco. Hazlo por esas conversaciones interminables con una cerveza en la mano y la compañía de un compañero cazador. Hazlo por ese plato de liebre con arroz, de perdiz en escabeche. Por esa hamburguesa de jabalí, o ese guiso de corzo. Hazlo por esos momentos en los que, en silencio, caminas por la naturaleza y te sientes parte de ella. Libre. Salvaje.

Hazlo por los madrugones, por las noches en vela, por las risas de tus compañeros cuando fallas. Por ese cielo que tocas cuando lo consigues. Hazlo por tu derecho a elegir. Hazlo para reivindicarte. Para plantar cara a la realidad virtual que quiere mandar en tu vida, detrás de cobardes perfiles y humanos virtuales. Hazlo para reivindicar tu derecho a ser quien eres. Hazlo por tu libertad. Hazlo por tu derecho a educar a tus hijos en los valores en los que crees. Hazlo por Mel. 

Hazlo para plantar cara a los camisas pardas del Pacma. Hazlo por las noticias falsas contra la caza. Por el acoso en los medios. Por la criminalización gratuita. Hazlo para ciscarte en la puñetera posverdad. Hazlo por lo que quieras, pero el próximo 15 de abril sal a la calle y movilízate para decir basta y gritar «Sí a la caza».