Maikel Mora, un joven agricultor valenciano, ha sido multado con unos 6.000 euros correspondientes a la devolución de la diferencia entre la cuota de autónomo y la tarifa plana rural que venía abonando, más un 30% de recargo de intereses, según ha denunciado la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) a la que pertenece. El motivo es haber incumplido uno de los requisitos de esta bonificación: cambiar el padrón de su vivienda habitual al pueblo de al lado antes de cinco años.

Maikel posee olivos y almendros en ambos términos municipales, y se ha trasladado de Jalance a Cofrentes, una localidad de la misma comarca del Valle de Ayora (Valencia) que se encuentra a apenas seis kilómetros de distancia y que igualmente tiene menos de 5.000 habitantes.

«Esta sanción pone en peligro la viabilidad de mi explotación»

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Tractor. © N. H.

Según denuncia el propio agricultor en el comunicado de ASAJA, «no tiene ningún sentido que te quiten la tarifa plana de autónomo agrario, además de devolver la cantidad bonificada y de pagar los intereses, por seguir cultivando los campos desde otro pueblo cercano que está en la misma situación de riesgo de despoblación».

E incide en que «esta sanción pone en peligro la viabilidad de mi explotación y, tras realizar algunas consultas, parece que no soy el único caso, sino que habrían más jóvenes que también han perdido la tarifa plana rural por mudarse a otras localidades cercanas». 

ASAJA denuncia la «voracidad recaudatoria de este Gobierno»

Por su parte, AVA-ASAJA ha denunciado en la nota la «voracidad recaudatoria de este Gobierno que, en lugar de apoyar a los jóvenes agricultores a incorporarse al campo y garantizar el necesario relevo generacional, los está expulsando con sanciones surrealistas, trabas burocráticas y normativas cada vez más exigentes». Por ello, la organización presidida por Cristóbal Aguado ha solicitado a las administraciones medidas que faciliten y agilicen la actividad agraria, como la supresión del requisito del mantenimiento del padrón durante los primeros cinco años, mientras se resida en pueblos menores de 5.000 habitantes, para beneficiarse de la tarifa plana rural. 

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