Fue una de las grande novedades de Mauser en el Shot Show de Las Vegas (EEUU) y en la IWA de Nuremberg (Alemania) en 2018. El lanzamiento del Mauser M18 hizo que todos comprendiéramos que nos encontrábamos ante un rifle que, sin duda alguna, va a hacer historia. Y es que nadie esperaba que la mítica firma Mauser, que diseñó el sistema de repetición que han utilizado la mayor parte de los rifles de cerrojo del mundo, lanzara al mercado un modelo por sólo 799 euros. Pero lo hizo.
Este rifle tan económico forma una combinación muy atractiva si lo equipamos con un Zeiss Conquest V4, un visor de gran calidad y precio contenido que nos permite contar con un equipo ‘todoterreno’ por poco más de 1.800 euros. Para la prueba, Excopesa, la firma que distribuye ambos productos en España, nos proporcionó el Mauser M18 equipado con un Zeiss Conquest V4 3-12×56, una combinación perfecta para aquellos que quieren un rifle ‘todo en uno’ que le acompañe en prácticamente cualquier tipo de modalidad. La munición elegida fue la GECO Teilmantel de 170 grains.
Toma de contacto del Mauser M18 y puesta a tiro con el Zeiss V4
El Mauser M18 no era nuevo para mí. Ya había tenido ocasión de dispararlo en anteriores ocasiones, aunque nunca en una prueba tan intensa como la que teníamos preparada: prueba en campo de tiro, montería y rececho. El objetivo era comprobar su rendimiento del rifle en todos estos terrenos.
La primera parte de este test de campo comenzó con su puesta a tiro a 100 metros. Tras colimarlo, realicé tres disparos que impactaron desviados unos cinco centímetros a la izquierda y un poco elevados. Tras realizar las correcciones oportunas volví a tirar, consiguiendo la agrupación que se muestra a continuación.
He de reconocer que no soy un sniper –el impacto de la derecha da fe de ello–, pero aún así pude certificar que el conjunto Mauser M18 y Zeiss V4 3-12×56 fue capaz de agrupar en 0,8 MOA aproximadamente. El disparador, directo y de presión regulable, me resultó de gran utilidad para alcanzar esa precisión SUB-MOA que promete el fabricante.
Tras esto, realicé varias series más. En total, 20 disparos en los que pude comprobar el cómodo retroceso del M18 en un calibre tan versátil como el .308, más que suficiente para los venados o cochinos de nuestras monterías, los corzos o las cabras en alta montaña.
Siguiente destino: montería
Aunque la prueba de campo fue satisfactoria, quisimos ver cómo se comportaba el rifle con caza real. Para ello acudimos a una montería en Zarza de Granadilla (Cáceres), donde ocupamos un puesto en la traviesa central. El día fue muy desapacible y, aunque presenciamos varios lances de puestos vecinos, no tuvimos ocasión de disparar. La lluvia y el frío pusieron a prueba nuestra afición y el equipo. Sin un paragüas bajo el que cobijarnos, operamos el M18 bajo la lluvia.
Si he de subrayar dos aspectos que me gustaron especialmente uno de ellos fue la suavidad de su cerrojo –no es algo de lo que puedan presumir todos los rifles de su rango de precios– y otro, la fiabilidad con la que se empuña aun estando empapado de agua gracias a las inserciones antideslizantes de la parte baja de su guardamanos y de la parte delantera del pistolet.
La caja sintética de color negro del Mauser M18 –hasta ahora la única disponible, aunque se han presentado nuevos colores en el último Shot Show– mantiene el cañón siempre flotado, por lo que su precisión nunca se ve alterada por extremas que sean las condiciones externas. En calibre estándar, como el .308 probado, almacena cinco cartuchos en su cargador –más otro en la recámara–.
Adicionalmente la cantonera del rifle se puede retirar presionando los dos logotipos laterales que posee para extraer un kit de limpieza, que en días como el de nuestra montería resulta especialmente útil para limpiar y secar el cañón bien antes de guardarlo en el armero.
Segunda oportunidad
Tras la infructuosa montería a la que acudimos con el Mauser M18 decidí llevármelo a una batida cochinera en Salamanca. Una vez más la mañana transcurrió sin sobresaltos hasta que casi al final de la jornada un zorro extraordinariamente oscuro –su lomo era prácticamente negro– intentó zafarse de la mancha a unos 50 metros de mi postura, avanzando a paso ligero entre algunas matas que lo ocultaban de forma intermitente.
No podía perder tiempo, así que de un rápido giro de mano –fue casi un acto reflejo– coloqué el rango de aumentos del V4 en el ocho –en ese momento estaba en el cuatro– y encaré a toda prisa. En momentos como este es cuando aprecias detalles como el del diseño de la culata del M18 y las monturas HexaLock que incorpora para sujetar el visor.
Fabricadas especialmente para los rifles Mauser, permiten un montaje de visor muy bajo que además proporciona al conjunto una estética muy estilizada. Esto se traduce en una rápida adquisición del blanco –nada más echarte el rifle a la cara estás viendo nítidamente el campo de visión en el que se encuentra la pieza– y te concede un tiempo que puede ser clave para resolver con éxito el lance.
Consciente de que solamente tendría una oportunidad de disparo debido a la velocidad que llevaba y el escaso tiradero que tenía, seguí la silueta del zorro mientras se ocultaba y se descubría y, cuando salió a los únicos diez metros limpios de terreno que había antes de llegar al perdedero, corrí la mano con seguridad y apreté el gatillo.
La Geco Teilmantel de 170 grains realizó una discreta entrada por el lado del impacto, como se puede ver en la foto, pero expandió bien a pesar del pequeño tamaño de una pieza como el zorro. El orificio de salida, después de impactar con los huesos de las paletillas de ambas patas, era de unos seis centímetros de diámetro. Este proyectil semiblindado de punta blanda ha sido diseñado para abatir especies de tamaño pequeño y medio, que es el que tienen las españolas y, como pudimos comprobar en este lance, cede su energía con gran rapidez.
Mis conclusiones sobre el conjunto M18 Extreme y Zeiss V4 3-12×56
Teníamos reservado un precinto de corza en Burgos para probarlo también en rececho, pero las nevadas de febrero no nos permitieron realizarlo. Aún así tuvimos ocasión de testar este conjunto millenial que reúne toda calidad que se espera de dos prestigiosas firmas como son Mauser y Zeiss, pero a un precio muy contenido: desde poco más de 1.800 euros.
Es una opción todoterreno que cubre todo el espectro de modalidades y piezas españolas, otorgando un plus de resistencia gracias a su robusto acabado sintético: puedes someterlo a duras jornadas de caza que no perderá precisión por mucho que las condiciones externas lo castiguen.
Los datos del Mauser M18 Extreme
- Tipo de arma: rifle de cerrojo.
- Cañón: fabricado en acero.
- Armazon: de acero del tipo cerrado.
- Cerrojo: cuerpo cilíndrico con palanca
terminada en bola sobredimensionada. - Cargador: de polímero desmontable, con capacidad para 5+1 cartuchos.
- Caja: sintética.
- Gatillo: directo y regulable.
- Seguro: de tres posiciones.
- Longitud de cañón: 56 cm.
- Longitud total: 106 cm.
- Peso: 2,9 kg.
Los datos del Zeiss V4 3-12×56
- Aumentos: 3-12x
- Diámetro del objetivo: 56 mm.
- Cuerpo: de aleación (aluminio) de una sola pieza de 30 mm.
- Retículas: tipo 60 iluminada (modelo probado) y 20 (Z-Plex).
- Unidad de iluminación: permite iluminar de día o de noche con un punto de luz roja el centro de la retícula con 10 niveles de intensidad con posición intermedia de apagado.
- Corrección por clic: 0,7 cm a 100 m (1/4 MOA).
- Paralaje: libre de paralaje a 100 yardas (91,4 metros).
- Campo de visión: 12,70-3,2 metros a los 100 m.
- Distancia al ojo: 90 mm.
- Margen de ajuste de dioptrías: -3/+2.
- Transmisión de la luz: Más del 90 por ciento.
- Lentes: Tratadas con LotuTec.
- Impermeabilidad: 400 mBar.
- Accesorios: Se suministra en estuche Zeiss con tapas para el ocular y objetivo, batería CR 2032, paño de limpieza e instrucciones.
- Longitud: 368 mm.
- Peso: 610 gramos.
- Más Info: Web de Excopesa.