Ya hay fecha definitiva para la votación de la Ley de Bienestar Animal en el Pleno del Congreso de los Diputados: esta tendrá lugar el próximo jueves, 9 de febrero. Ese día será sometido a votación el polémico texto, a pesar del abrumador rechazo social existente que ha pedido la retirada del texto de forma reiterada: desde la manifestación del pasado 20 de marzo que congregó a más de medio millón de personas en Madrid hasta la que tendrá lugar solo cuatro días antes, el 5 de febrero, y que ha sido organizada por el sector de las mascotas.

El texto llega al pleno además con dos votos particulares presentados por Unidas Podemos para que sean retiradas las enmiendas 1, 2, 3 y 4 del PSOE, entre la que se encuentra la que excluye a los perros de caza, de ganado y de trabajo del ámbito de la ley animalista. Será la última intentona del partido morado para hacer que el texto no deje fuera a los animales relacionados con la actividad cinegética. No hay que olvidar que la formación aseguró que votaría en contra de la ley si esto se producía, por lo que ahora queda la incógnita de saber si cumplirá su palabra en caso de que el voto particular no prospere.

La enmienda de la discordia

Recordamos que, en el mes de diciembre, se celebró la Comisión de Derechos Sociales y Políticas Integrales de la Discapacidad en la que la mayoría de los grupos parlamentarios (PSOE, PP, VOX, PNV, y Coalición Canaria) apoyaron la enmienda del PSOE para sacar a los perros de caza y de trabajo del texto final. Según éste, quedan excluidos los perros de caza, rehalas y animales auxiliares de caza, y se añade que «todos ellos se regulan y quedarán protegidos por la normativa vigente europea, estatal y autonómica correspondientes y que les sea de aplicación al margen de esta ley».

¿Qué recorrido le queda al texto para su aprobación definitiva?

El recorrido del texto para su aprobación definitiva -tras pasar la criba del Congreso, en el que previsiblemente saldrá adelante- será ir al Senado -probablemente en marzo-. Una vez que este órgano también dé el visto bueno a la ley animalista, volverá al Congreso, donde se votará definitivamente y se publicará en el Boletín Oficial del Estado, tras lo cual entrará en vigor a los seis meses.