En plena era de la tecnología punta y la maquinaria agrícola de última generación, hay quien prefiere mirar atrás y sacar partido a lo que muchos considerarían una pieza de museo. Es el caso del protagonista de un vídeo que se ha hecho viral en Instagram, donde un agricultor demuestra que todavía es posible arar la tierra con un Land Rover de 1948. La escena, tan inesperada como entrañable, ha captado la atención de miles de usuarios por su mezcla de nostalgia, ingenio y capacidad mecánica.

El vehículo en cuestión no es otro que una de las primeras unidades del modelo original de Land Rover, el predecesor del legendario Defender. Aquel coche fue presentado al mundo en 1948, durante el Amsterdam Motor Show, donde tres unidades de preproducción despertaron la curiosidad del público gracias a su robustez y versatilidad. Lo que entonces parecía una apuesta arriesgada, acabaría convirtiéndose en el inicio de una de las sagas más emblemáticas del mundo del motor.

Ingenio rural con sabor a historia

Décadas después, uno de aquellos vehículos vuelve a demostrar de lo que es capaz. En el vídeo difundido a través de Instagram, se puede ver cómo el conductor acopla unas vertederas al Land Rover y comienza a trazar surcos sobre un terreno agrícola. La imagen es tan llamativa como eficaz: el todoterreno avanza sin dificultad, arrastrando el apero con una solvencia que deja claro que estos coches fueron concebidos para mucho más que el asfalto.

El autor de la publicación no ha detallado en qué lugar fue grabado el vídeo ni cuántas horas lleva ese Land Rover trabajando en el campo. Lo que sí ha conseguido es que la escena se viralice y provoque una oleada de reacciones entre los usuarios de redes sociales.

Entre la admiración y la polémica

Las reacciones que ha generado este vídeo entre los usuarios de esta red social han sido muchas y muy variadas. La mayoría de ellos han aprovechado para tomarse las imágenes con humor y han hecho bromas incluso sobre la curiosa escena. Otros, en cambio, han criticado la idea y los daños que el vehículo podría sufrir.

Sea como sea, el vídeo ha servido para poner en valor la resistencia y polivalencia de estos modelos clásicos, y para recordar que en el campo, muchas veces, el ingenio pesa más que la tecnología.

Sobre el autor