El papel de la mujer rural es cada vez más destacado y su trabajo especialmente en la agricultura y la ganadería está más valorado. Además, el esfuerzo físico que en él se realiza es patente, como así destaca la siguiente imagen de la joven gallega Cristina Boga Sanmartín, que ha demostrado que el empacado y recogida del heno puede ser la mejor clase de gimnasio.
Su hermana Noelia le hizo una fotografía este verano en mitad de su «rutina de levantamiento de pacas» y la imagen ha sido la ganadora del primer concurso fotográfico por el Día de la Mujer Rural del municipio de Negreira.
La joven, de 32 años, reivindica esta actividad «como fuente de tonificación de las áreas del cuerpo donde se encuentran algunos de los músculos más grandes y relevantes para el control de la correcta postura corporal», además de reivindicación del trabajo femenino en el mundo rural, expone en palabras a La Voz de Galicia.
«El trabajo duro que hacemos las mujeres en las zonas rurales es muy invisible y no somos reconocidas. Parece que los hombres son los únicos que hacen el trabajo pesado y solo estamos allí para preparar el almuerzo. Sin embargo, soy yo quien pone las alpacas en el carro, como tantos otros, aunque la gente se sorprenda, y creo que es importante recordar que estamos entrenados en todos los sentidos, incluido el trabajo físico», ha añadido.
