La mala noticia se hizo realidad el pasado viernes, 17 de marzo. Durante esa jornada, los Diputados británicos daban luz verde a una ley por la que se prohibirá la importación de trofeos de caza, si no es rechazada en su último paso en la Cámara Alta. La medida se extenderá a todo el territorio del Reino Unido y ha tenido una muy buena acogida por algunos defensores del medioambiente.

Sin embargo y como se suele decir, no es oro todo lo que reluce. Lo cierto es que esta medida puede ser contraproducente y llegar a provocar serias consecuencias. Entre ellas, científicos han advertido que esto podría afectar a la conservación de especies amenazadas.

¿Cuándo surge la propuesta de prohibición de la importación de trofeos de caza?

Se trata de un proyecto de ley que se anunció en diciembre de 2021 y surgió tras la muerte de Cecil el león. El animal fue abatido por un dentista estadounidense en una reserva de Zimbabue, en 2015, y despertó gran indignación alrededor del mundo.

A pesar de haber conseguido el pasado viernes el visto bueno de los Diputados británicos, conformando estos la Cámara Baja del Parlamento, todavía falta un paso más para que la normativa entre en vigor. Esta nueva legislación aún tendrá que recibir la aprobación de la Cámara Alta del Parlamento, que está llevando a cabo ahora su segunda lectura.

En concreto, esta medida se refiere a los trofeos traídos de las cacerías africanas y es un asunto con más complejidad que la que se le atribuye. Sin ir más lejos, el miércoles anterior a su aprobación, el ministro de Desarrollo británico, Andrew Mitchell, recibió una carta que advertía de ello.

Decenas de conservacionistas y líderes comunitarios de Angola, Bostwana, Namibia y Zambia firmaban la misiva y pedían que se abandonara dicho proyecto de ley. ¿La razón? El gran impacto negativo que este puede tener para la conservación de las especies.

La preservación de las especies africanas, en peligro

Los funcionarios advertían, en primer lugar, que «la disminución de los ingresos de la caza de trofeos aumentará la caza furtiva, porque habrá menos fondos para pagar los salarios de los guardabosques de la reserva».

Siguiendo la misma línea, avisaron de que «la gente piensa que están preservando a los animales, pero en realidad los dañan». Las palabras de estos líderes africanos recibieron el apoyo del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).

Desde esta institución, no hace mucho que se declaró que la caza de trofeos, cuando tiene una buena gestión, ha demostrado resultar una «herramienta de conservación eficaz». Esto es especialmente importante teniendo en cuenta que, desde 1970, la cifra de animales que viven en libertad en África se ha reducido en un 66%.

Los efectos negativos de prohibir la importación de trofeos de caza

En el año 2019, 133 científicos destacados ya encendieron la alarma de que prohibir la caza sin implementar alternativas viables para proteger el hábitat ni generar otro tipo de ingresos para las comunidades locales supondría poner en peligro la biodiversidad.

Un ejemplo real lo tenemos en Kenia. Allí se aprobó la prohibición de la caza en 1977 y, desde entonces, se ha sufrido una disminución del 70-88% de algunas especies. De igual modo, tras prohibirse las importaciones de trofeos de elefante a Estados Unidos, Tanzania perdió unidades de acción contra el furtivismo y millones de dólares en áreas de caza.

Ante esto y a la espera de la aprobación final, tan solo queda lamentar el voto de los parlamentarios británicos que, sin ser su objetivo, va a poner en peligro la preservación de algunas especies salvajes africanas, beneficiadas de la financiación consecuente de las cacerías organizadas.