Una investigación revela que los gatos matan más de un millón de pájaros al día en Australia. Incluyendo aves de 338 especies, entre ellas algunas amenazadas.
5/10/2017 | Redacción JyS

Gato con su presa en la boca. / Shutterstock. 

Según un estudio publicado en la revista Biological Conversation esta alarmante situación está causando el declive de muchas especies en peligro de extinción. Los datos revelan que, anualmente, los gatos domésticos acaban con la vida de 61 millones de aves, mientras que los callejeros matan otros 316 millones.
El investigador John Woinarski, de la Universidad Charles Darwin, destacó que si no se pone remedio es probable que la actual situación conduzca al declive de muchas especies. El estudio, que se basa en la densidad de la población felina y en su dieta, desvela que los gatos matan 338 tipos de aves, casi la mitad de las especies nativas de Australia, incluyendo 71 especies amenazadas como el zorzal, la codorniz moteada, y el loro de noche. 
Sebastian Lang, comisionado de Especies Amenazadas en Australia, ha calificado el estudio de «extremadamente importante y de gran preocupación». «El conocimiento del impacto de los gatos en mamíferos amenazados fue un estímulo importante en nuestra estrategia de especies amenazadas, que priorizó acciones de control de gatos callejeros«, dijo Lang. «Esta nueva investigación hace hincapié en la necesidad de seguir trabajando para reducir el impacto de los gatos en nuestra biodiversidad».

Hasta el 2020 se sacrificarán dos millones de gatos

Las medidas aplicables para resolver la situación no son muy diferentes a las que ya anunció su ministro de Medio Ambiente, Greg Hunt hace dos años cuando afirmó que “para 2020 quiero ver dos millones de gatos sacrificados, cinco nuevas islas y diez nuevos territorios libres de gatos salvajes, así como medidas de control en más de diez millones de hectáreas”. 
El Gobierno australiano ha aprobado 20 millones de euros a proyectos para reducir el impacto de los gatos callejeros en la vida silvestre. En junio comenzó la construcción de una gigantesca área libre de gatos de cerca de 700 kilómetros cuadrados que permitirá la reintroducción de especies salvajes que se encuentran al borde de la extinción por culpa de estos felinos.