Miembros de la Guardia Civil han detenido a un presunto furtivo que fue sorprendido cuando salía de una finca en la localidad gaditana de Prado del Rey, portando un total de 126 ejemplares de aves abatidas de forma ilegal, la mayoría de ellas especies protegidas y que para apresarlas se habían utilizado 200 trampas ilegales denominadas perchas.

En una nota de prensa, la Guardia Civil señala que el supuesto furtivo, de 57 años de edad y natural de Bornos (Cádiz) ha sido detenido por un presunto delito contra la flora y la fauna, así como, a formular denuncia a la Ley 8/2003 de Flora y Fauna Silvestre por la tenencia de especies cuya captura se encuentra prohibida y está incluida como de interés especial en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas.

Así se desarrollaron los hechos

Según sigue exponiendo la Benemérita en la citada nota que recoge la agencia, los hechos ocurrieron el 30 de diciembre, alrededor de las 14:00 horas, cuando agentes del Servicio de Seguridad Ciudadana del puesto de Prado del Rey se encontraban desarrollando un dispositivo para la prevención del furtivismo en esta zona de la sierra gaditana. Al tener conocimiento de la posible práctica de esta actividad ilícita en una finca de la zona, los agentes establecieron un dispositivo policial para su vigilancia.

58 especies protegidas y 200 perchas

De este modo consiguieron localizar al autor cuando se disponía a abandonar una finca en Prado del Rey, en su vehículo particular y transportando los 126 ejemplares de especies. Entre ellas se encontraban 58 ejemplares de especies protegidas. Del mismo modo se han intervenido y retirado del medio ambiente 200 perchas utilizadas como trampas de caza no selectivas.

La Guardia Civil ha indicado que están continuando con las actuaciones y las labores de investigación para determinar el posible destino final de las especies en distribución y comercialización para servicios de hostelería, un destino que no está permitido fuera del autoconsumo de procedencia lícita de la actividad cinegética.