La finca toledana de caza ‘El Castañar‘ ha obtenido el XIV Premio Fondena para la Protección de la Naturaleza por su ejemplar labor en los Montes de Toledo a través de una explotación diversificada, buscando la complementariedad entre aprovechamientos y su sostenibilidad económica.

Sus terrenos albergan actualmente nueve parejas estables de águila imperial y un gran número de ejemplares inmaduros que recorren sus tierras. En cuanto al lince ibérico, El Castañar fue la pionera en reintroducir esta especie en Castilla-La Mancha. Hoy en día cuenta con una población de cinco hembras reproductoras, cinco machos y varios ejemplares jóvenes.

Se prevé que el Premio -dotado con 30.000 euros- se entregue en noviembre a Rafael Finat, gestor de la finca.

El Castañar, ejemplo de gestión de las poblaciones de lince ibérico en España

Lince. ©Shutterstock
Lince. © Shutterstock

El Castañar está situada en el lado norte de los Montes de Toledo, en la provincia de Toledo. Es una finca de unas 5.000 hectáreas que abarca todas las formas del bosque mediterráneo: la zona norte de la finca tiene una orografía ondulada con colinas y barrancos, donde hay parte de bosque mediterráneo con árboles dispersos y parte de dehesa de encinas con cultivos.

Al sur cuenta con una zona más abrupta con una altura máxima de 1.200 metros en la que podemos encontrar encinas y algunos quejigos, además de los castaños que le dan nombre a la finca. Su altitud media es de unos 800 metros.

Premiados por su importante aportación a la conservación de la fauna y flora

El Premio Fondena es un reconocimiento que otorga cada dos años la Fundación Fondo para la Protección de la Naturaleza (Fondena), una de las entidades más veteranas dedicadas a la protección de la naturaleza en España. Su objetivo es distinguir a aquella persona, entidad, asociación, institución o grupo de trabajo cuya labor creativa o de investigación haya supuesto una importante aportación para la conservación de la fauna y flora del reino de España.

Desde su fundación, Fondena ha participado en varios proyectos como la conservación del lince ibérico, la protección y recuperación del quebrantahuesos en el Pirineo español o el mantenimiento del Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega de la Serrezuela, un lugar de gran importancia para las rapaces ibéricas con una de las principales colonias de buitres leonados de nuestro país.